5 razones para marchar por el centro de Madrid (y del mundo)

Llegan a las fiestas del Orgullo y el esperado verano. Como cada año, las colaboradoras de revista MíraLES marchan por el centro de Madrid con su pancarta, visibles y orgullosas. Para las que siempre nos acompañan y, sobre todo, para las que dicen no sentirse representadas, tenemos cinco razones para incentivarlas a venir con nosotras:

1. Porque tenemos mala memoria. Porque es una fiesta que conmemora la consecución de derechos que hemos debido luchar uno por uno. A las lesbianas, a los gays, a los bisexuales y a los transexuales, nada se nos ha dado de manera gratuita. El que no estemos encerradas en una clínica psiquiátrica, ni recibiendo descargas eléctricas en la cabeza, el que no estemos obligadas a casarnos con un hombre en contra de nuestra voluntad, el que podamos ser no heterosexuales practicantes y no seamos condenadas a pasar años en la cárcel, el que podamos leer libros y ver películas de temática lésbica sin que estén prohibidas, el que estemos legalmente protegidas si somos discriminadas, el que podamos casarnos y tener hijos, el que no seamos inhabilitadas para ocupar cargos públicos ni diversos trabajos. El que podamos vivir como vivimos parece obvio pero no lo es. Ha costado años de manifestaciones, creatividad, esfuerzo y visibilidad. Vidas y malos momentos. Para dar gracias, y no a Dios, sino que a todas esas y esos activistas que siguen intentando que nuestra vida sea mejor, más completa y más justa.

2. Porque el 21 de mayo, las lesbianas y gays de Ucrania intentaron celebrar su marcha del Orgullo y fueron atacados por más de 500 jóvenes homófobos. La marcha se canceló y algunos activistas fueron pateados en el suelo y rociados con gases lacrimógenos. Porque en Rusia el gobierno lleva siete años prohibiendo la marcha del Orgullo LGTB. Porque en muchos países no pueden ni siquiera planteárselo.

3. Porque todas las que estamos en España, y sobre todo en Madrid, tenemos la oportunidad de asistir a la marcha del Orgullo LGTB más importante de Europa y una de las más importantes del mundo. Y esto tampoco ha sido fácil de conseguir. La del 1993 contó con algo más de 500 participantes. Al año siguiente casi se llegó a los mil, muchos de ellos disfrazados para evitar ser reconocidos. En 1996, cuando el Código Penal ya protegía como un Derecho Fundamental la orientación sexual, la marcha del Orgullo congregó a más de tres mil personas que gritaban “visibilidad”. Apareció la primera carroza y se sumaron otras ciudades, como Barcelona, Sevilla, Bilbao y Valencia.

Las victorias políticas fueron sumando asistentes. Hasta que en 2005, con el derecho al matrimonio recién aprobado, las calles de Madrid vieron desfilar a más de un millón y medio de personas.

4. Porque las lesbianas existimos aunque a algunos les cueste creerlo. Porque somos muchas, porque somos diferentes. Mayores, menores, de pelo largo, pelo corto, con vestidos, pantalones, embarazadas, madres, solteras, casadas, divorciadas, con tatuajes, con piercings, sin dibujos ni agujeros, escritoras, pintoras, científicas, matemáticas, consultoras, abogadas, estudiantes, amas de casa, jubiladas. Porque somos muchas. Y porque ser visibles implica dejarse ver, conquistar los espacios. Es nuestra fiesta y estamos todas invitadas.

5. Porque en estos tiempos de tantos recortes y derechos truncados, de injusticias y pérdida de libertades, es bueno celebrar y festejar los derechos que aún tenemos y que defendemos día a día. Es bueno demostrar que nada ni nadie nos hará retroceder, que hay armarios que se han cerrado y lo han hecho para siempre.

¿Quieres venir a la marcha del Orgullo LGTB con las chicas de MíraLES? Te esperamos el sábado 30 de junio a las 18.00 horas en la Puerta de Alcalá. Para evitar desencuentros, escríbenos a [email protected]