¡Muy buenos y fríos días, amigas MiraLESeras! ¿Qué tal lleváis la vuelta al deporte?
Imagino que muchas de vosotras habréis aprovechado el mes de septiembre para retomar algún deporte o comenzar a hacer algo de actividad física –sí sí… propósitos posvacacionales de “desintoxicación” jijiji- pues os recomiendo este artículo tanto si ese es vuestro caso, como si ya lleváis un tiempo haciendo deporte y alguna vez os habéis preguntado: “¿Serán estas las zapas correctas para ir a correr?”, “¿Me sirve de algo el relojito que me regalaron las navidades pasadas y que empieza a pitar nada más empezar?” o “¿Puedo seguir aprovechando el top de la temporada pasada?”.
Así que: bienvenidas al top 5 de accesorios básicos para iniciarse con una actividad deportiva o continuar y refrescar algunas cositas básicas que se te puedan pasar por alto.
1) SUJETADOR DEPORTIVO
En primer lugar, marco y remarco el sujetador deportivo. Miles de veces veo chicas tanto en el gimnasio como en la calle corriendo con un sujetador viejo o haciendo step con un top que ni Madonna en sus años mozos. Chicas, invertid en un buen sujetador y aseguraos máxima sujeción y confort especialmente si realizáis ejercicio de alto impacto, más aún si tenéis pecho grande. El sujetador no sólo previene la caída precoz del pecho, también protege y amortigua los impactos derivados de la práctica deportiva, que pueden dar lugar a pequeñas roturas y lesiones internas del tejido celular mamario.
Entonces, según todo lo anterior, ¿qué tipo de sujetador elijo? El tipo de sujetador se elegirá en función del deporte practicado, así, si practicas yoga, paseos o alguna actividad ligera, deberás utilizar un sujetador con control ligero; si vas a practicar un deporte de medio impacto como bici, marcha o senderismo, tendrás que elegir uno de sujeción media /firme; y si lo tuyo son los deportes de alto impacto (carrera, boxeo, step…) asegúrate un sujetador de sujeción alta.
Una vez determinada la sujeción, la cosa se simplifica y aquí entran en juego aspectos más subjetivos como el tipo de tirantes (cruzados o simples), color, sujeción del pecho (procura siempre elegir una copa que envuelva y proteja la mama, y en el caso de pechos grandes, que comprima la mama hacia el pecho) y material utilizado (mejor materiales transpirables, de fibras que permitan múltiples lavados –procura no abusar del lavado a máquina ni del centrifugado, así como del suavizante, que debilita bastante las fibras de las que suelen estar fabricados disminuyendo su vida útil–).
2) ZAPATILLAS
Las zapas son también unas de las grandes olvidadas de los iniciados en el deporte. Si te fijas bien un día que vayas al parque a correr, verás que un gran porcentaje de principiantes están corriendo o trotando con zapatillas súper viejas, mal anudadas, gastadas, sin suela y un larguísimo etcétera de errores que deberíamos cuidar. Porque, al igual que tratamos de invertir un poco más en salud, comprando productos que previenen enfermedades, aumentan las defensas, etcétera, ¿por qué no invertimos también en unas zapatillas de calidad? Correr con calzado inadecuado puede provocar lesiones musculares a largo plazo, como desgastes –sobre todo en las rodillas–, sobrecargas musculares –de la musculatura de piernas, abdomen y lumbares– y dolores continuados (échale un ojo a esto) que podemos prevenir con una zapatilla adecuada al igual que prevenimos otras cosas con cremas o alimentos enriquecidos. Venga, chicas, no os digo que os gastéis 150€ en unas zapatillas de competición, pero sí que dejéis de lado esas zapas de Carrefour que apenas tienen suela y te pilles unas buenas zapas de iniciación (las hay a partir de 50€ de muy buena calidad), asegurándote que tengan una buena suela, que no te queden demasiado justas –recuerda que al correr el pie se desplaza por la zapatilla y se hincha, así que debes procurar que tengan al menos 1 centímetro de holgura–, que sujeten bien el pie y te queden cómodas. No te dejes llevar por el diseño o el color, elige bien aquella que se adapte al pie, no dudes que si en el momento de comprar la zapatilla ya te molesta, después de media hora trotando puede ser un infierno. Como consejo final, si lo tuyo es la el running, te recomiendo que te hagas un análisis de la pisada para poder determinar si eres una corredora neutra, pronadora o supinadora y elegir tu zapatilla en función de cómo pisas. No sólo evitarás lesiones sino que también favorece que mejores como corredora.
3) ROPA ADECUADA
Es fundamental elegir prendas ligeras y transpirables, fáciles de lavar y que ajusten de forma cómoda, que no tengan etiquetas ni costuras que puedan provocarnos irritaciones o rozaduras.
Además de lo anterior, hemos de tener en cuenta el color de la ropa, por ejemplo, claros en verano o vistosos en invierno (incluso fluorescentes si practicamos deporte al aire libre); el tejido (mejor prendas que absorban la humedad y no provoquen alergias) o la holgura (debe quedar algo holgada para que favorezca la aireación, pero no suelta, que pueda engancharse o que disminuya nuestra aerodinámica).
Por lo demás, las opciones son múltiples, encontrarás prendas de todos los tipos, colores, diseños, tejidos… Es cuestión de ir probando y elegir la que te siente mejor y con la que estés más cómoda. Existen prendas específicas adaptadas a cada deporte, así que no te cortes y a probar.
Mención especial merecen los calcetines, cuidado con las costuras o con que te queden demasiado grandes o pequeños, las ampollas y rozaduras de después, duelen.
4) PULSÓMETRO
Aunque puedes iniciarte sin problema en cualquier deporte sin necesidad de utilizar un pulsómetro, sí que te lo recomendaría si finalmente comienzas a practicarlo con regularidad, especialmente si te decantas por una disciplina cardiovascular.
Con este relojito que te va mostrando tu frecuencia cardiaca pitando en función de la intensidad del ejercicio, no sólo trabajarás de forma más segura (te permite entrenar dentro de rangos seguros de frecuencia cardiaca, asegurándote que tu corazón no sobrepase frecuencias demasiado altas) sino que serás más eficiente y podrás entrenar más duro y con mayores adaptaciones. ¿Y por qué? Pues porque si entrenas en función de tu frecuencia cardiaca estarás sometiendo a tu cuerpo a un esfuerzo soportable, de forma que además de tu musculatura, entrenarás de forma eficiente el músculo más importante: el corazón. Las ventajas de entrenar en función de tu frecuencia cardiaca merecen la pena: podrás diseñar entrenamientos orientados a diferentes objetivos (quemar grasa, aumentar resistencia…) o simplemente podrás entrenar asegurándote que el esfuerzo es adecuado a tu edad y estado de forma física, y que lo que estás haciendo te está sentando bien, evaluando tus progresos. Si te interesa algo básico, existen montones de modelos desde 20€ y de ahí hasta lo que quieras, puedes encontrar en el mercado pulsómetros con GPS, entrenadores personales que te mandan mensajes de ánimo, te recomiendan entrenamientos en función de cómo te haya ido el día, etcétera. Echa un vistazo por internet y te sorprenderás.
5) ACCESORIOS
Aquí he querido recoger todos aquellos accesorios que pueden parecernos “demasiado” para comenzar pero que para nada están de más.
Me refiero a artículos como cortavientos –mejor reflectantes para el invierno, especialmente si montas en bici–; gafas –imprescindibles en deportes como natación o ciclismo–; gorra –evitan insolaciones, que caiga el sudor y soportan el pelo, no es tan inútil como parece…–; guantes y muñequeras –si lo tuyo son las pesas o la bici, no dudes en adquirirlos, te aseguro que en dos semanas tendrás las palmas llenas de callos, poco estéticos…–; brazalete portamóvil /llaves –fundamental si te inicias en la carrera o al aire libre aumentando tu movilidad–, etcétera.
Espero que os haya gustado el artículo de hoy y que compartas con nosotras tus impresiones. ¿Te has iniciado este año en algún deporte? ¿Utilizas alguno de los artículos que hemos comentado hoy? ¿Echas de menos alguno?
CRISTINA BORRERO GONZÁLEZ
Técnico Superior en Dietética, experta en nutrición deportiva y entrenadora personal
Visita mi blog “Lapsus para la vida sana”
Madrecita. Debo ser muy burra con esto del deporte. Lo de las prendas un poco buenas y lo de las zapatillas no lo perdono, desde que ya me tengo en un concepto un poquito más alto como deportista. Pero lo del pulsómetro yo creía que era para los hombretones cuadraditos de mi gimnasio…
Buenas!! jejeje, suele pasar, no es cuestión de ser “burras”, a veces nos creemos que nos lanzamos a lo loco, en plan “pro” y muchas veces se nos escapan detalles importantes. A seguir así, dando caña al deporte y felices fiestas! 🙂
Afuffff… que cansancio, que de sudor, que agujetas más grandes! Y eso que todavía no he hecho mi lista de proósitos 2014, esa en la que desde Dios sabe cuando siempre está la de apuntarme al gimnasio y ponerme toda wenorra para volver loquitas a las suecas 😛
No sé yo si este año será en el que por fín alguna de las cosas de la lista me sean útiles :S
Jejejeje, venga mujer!! A por ese tipazo para volver locas a las suecas!! Feliz año!!