Una protesta en forma de beso colectivo contra la discriminación en Buenos Aires.

Aunque parezca mentira, la discriminación aún existe en las grandes ciudades como Buenos Aires, Argentina, donde más de un centenar de personas se reunieron frente a un local para protestar porque dos chicas habían sido expulsadas por besarse.

Hace unos días una pareja de lesbianas, Marisol y Magdalena, acudieron a una famosa pizzería de la ciudad a celebrar su aniversario. Su sorpresa llegó tras darse un beso mientras esperaban a que les entregaran su pedido, cuando recibieron por parte de uno de los empleados del local unas palabras nada agradables.
Tras indicarles que o dejaban de besarse o no tendría mas remedio que echarles del restaurante, las dos mujeres solicitaron el libro de reclamaciones, a lo cual no solo recibieron un trato nefasto por parte del personal de la pizzería, sino también las burlas de los presentes allí.
Pero lo mejor fue la actuación ante esta situación, ya que la pareja no se conformó con poner la reclamación, sino que decidieron manifestarse en la puerta del local de la cadena llamada Kentucky con la ayuda del colectivo por la diversidad. Bajo el lema “Basta de lesbofobia” organizaron una besada masiva donde un gran numero de lesbianas, gays, bisexuales, travestis, trans, así como heterosexuales se unieron a la protesta.

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Una pena que hoy en día sigan existiendo exclusiones de este tipo, pero ante estos casos nada mejor que reivindicar nuestros derechos como  en este caso hicieron Marisol y Magdalena, aportando su granito de arena al alcance de la igualdad y mostrando a todo aquel que aún no lo sepa que el amor es libre y no entiende de discriminación.

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