Coco Chanel, la reina de la moda

Grabielle Chanel, que así se llamaba en realidad Coco, nace en Saumur, Francia, en agosto de 1883. Su madre es una humilde campesina que intenta sacar a sus cinco hijos adelante como puede. Su padre es un vendedor ambulante que está la mayor parte del tiempo ausente y no se preocupa de su familia. Cuando Gabrielle tiene 12 años, su madre muere víctima de la tuberculosis. Es un duro golpe para la pequeña, que ya de adulta afirmaría: “Quería suicidarme. Todos los días pensaba en cómo quitarme la vida. Sólo el orgullo me salvó”.

Recuerdos en blanco y negro

El padre de Grabielle abandona a sus hijos después de la muerte de su esposa. Las tres hermanas son acogidas en un hospicio de monjas donde aprenden a coser, mientras los dos chicos se quedan a cargo de un granjero, con la condición de que trabajen para él a cambio de techo y comida.

Grabielle nunca olvidará esos años en el hospicio, porque hay cosas que no desaparecen de la memoria por mucho tiempo que pase. Recordará siempre los colores blanco y negro. El blanco de las inmensas paredes del orfanato, el negro de las enormes puertas. El blanco y negro de su uniforme. Siendo ya una diseñadora famosa utilizará el color negro para hacer sus diseños más elegantes, y de ese modo transformará ese triste recuerdo de su niñez, en una de sus más exitosas creaciones.

De Gabrielle a Coco Chanel

Gabrielle se ha convertido en una joven atractiva y empieza a frecuentar los lugares de ocio, entre ellos un café concierto muy conocido. Un día se atreve a subirse al escenario a cantar y el éxito es total. Una de sus canciones favoritas es Ko ko ri ko y a partir de ahí la comienzan a llamar la petite Coco.

En esos días también conoce a Étienne Balsan, un oficial de 24 años que proviene de una familia acomodada. Se hacen amantes y con él entra en contacto por primera vez con el mundo de la alta sociedad. Coco no quiere que su vida se parezca a la de su madre, por lo que aprovecha la oportunidad que le ofrece Balsan y se marcha a vivir con él.

Comienza a vestir de sport: zapato plano, ropas holgadas y un pequeño y sencillo sombrero de paja. La comodidad para ella es lo primero. Es una manera de vestir típicamente masculina, por lo que todo el mundo, especialmente las mujeres, comienzan a mirarla con curiosidad. Al principio el recelo y la crítica es lo que prevalece, pero poco a poco empiezan a acercarse y a preguntarle.

En aquellos tiempos las mujeres llevaban vestidos encorsetados y sombreros enormes y recargados de adornos. Aquellas damas de la alta sociedad se convierten en sus primeras clientas.

Coco le pide a Balsan que le deje dinero para abrir una tienda de sombreros. Este se niega en un primer momento, aunque luego cederá. Al mismo tiempo se cruza en su camino Boy Capel, y Coco deja a Balsan para irse con él.

En 1910 compra varias docenas de sombreros y los rediseña con su propio estilo. Los vende de inmediato. Un año más tarde abre una tienda en París que llama “Modas Chanel”. En 1913 ya obtiene beneficios y le devuelve el dinero prestado a Balsan. A partir de ese momento el éxito ya no la abandonará.

Mala suerte en el amor

Con Boy Capel mantiene una relación de ocho años. Ella confesaría que fue el hombre que más amó. Pero Capel la deja para casarse con una aristócrata, aunque su infelicidad le empuja de nuevo a los brazos de la diseñadora y vuelven a convertirse en amantes. Pero la desgracia roza de nuevo a Chanel y seis meses más tarde Capel fallece en un accidente de tráfico, el mismo día de Nochebuena.

Coco Chanel mantuvo relaciones con muchos hombres, unos casados y otros no, pero por unos motivos u otros, ninguna de esas relaciones llegó nunca a consolidarse en el tiempo. Sin embargo, con la mayoría de sus amantes mantuvo siempre una buena relación de amistad, con algunos incluso hasta el final de sus días.

¿Era bisexual Coco Chanel?

coco1La bisexualidad de Chanel sale a la luz en una biografía de hace cuatro años escrita por Lisa Chaney. Sin embargo, es difícil saber si es una realidad o sólo una estrategia para vender libros. La diseñadora, que se sepa, nunca reconoció su atracción por las mujeres y teniendo en cuenta su particular personalidad, es probable que no hubiese tenido ningún problema en confesarlo abiertamente de haber sido así. Por lo tanto, la duda se queda en el aire.

Rompiendo moldes

Rebelde, orgullosa, atrevida y con una imaginación sin límites, Coco Chanel cambia totalmente la forma de vestir de la mujer del siglo XX. Diseña faldas que dejan ver parte de la pierna, hace posible que las mujeres empiecen a llevar pantalones, convierte el vestido negro en símbolo de elegancia, introduce el punto en la alta costura, inventa la bisutería, diseña los zapatos de punta redonda sin tacón… Y para celebrar su 40º cumpleaños lanza al mercado el perfume Chanel Nº 5, que se hace mundialmente famoso y la convierte en millonaria.

Los cambios en la vida de Coco Chanel

En 1931 se lanza a la aventura en Hollywood y durante un año trabaja para la Metro Goldwyn Mayer, vistiendo a actrices como Greta Garbo, Marlene Dietrich y Katherine Hepburn. En sólo un año gana un millón de dólares.

Durante la Segunda Guerra Mundial conoce al barón Hans Gunther. Coco ha cumplido 58 años y el oficial es 15 años menor, pero aun así se convierten en amantes. Esa relación le pasa factura y cuando en 1944 los aliados liberan la ciudad de París, Coco es detenida. La acusan de colaborar con los alemanes.

En aquellos días, las mujeres que habían mantenido contacto con soldados germanos eran humilladas públicamente. Se les cortaba el pelo al cero o se las paseaba desnudas por toda la ciudad. Coco puede salvarse de ese escarnio gracias a sus influyentes amistades, por lo que después del interrogatorio es puesta en libertad.

El final de Chanel

La noche del 10 de enero de 1971, Coco Chanel fallece en su habitación del hotel Ritz. Tiene 87 años. El mundo amanece esa mañana con la noticia de su muerte en todos los periódicos.

Su cuerpo descansa en Lausana, Suiza, en una tumba custodiada por cinco cabezas de león. Representan su número de la suerte y su signo del zodiaco.

Chanel refleja a la perfección al signo de Leo. Orgullosa, creativa y con una gran fuerza de voluntad. Su personalidad se mantuvo intacta hasta el final de sus días. En una ocasión diría: “Detesto rebajarme, doblegarme, humillarme, someterme, no hacer lo que me da la gana”. Coco Chanel, sencillamente genial.

Beatriz Moragues

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1 comentario en “Coco Chanel, la reina de la moda”

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