Nuestras decisiones, incluso las más pequeñas, van trazando y pavimentando el camino por el que nos movemos y por el que llegamos adonde queremos ir.
A medio camino descubrimos que hay cosas que hablan más de nosotras mismas que lo que sale de nuestras bocas. Que la opinión que otros tienen de nosotras, el respeto, el amor, la estima, la amistad y la confianza que despertamos en otros tienen también mucho que ver con la forma en que nos tratamos a nosotras mismas.
Abril es el mes de la Visibilidad Lésbica. El recordatorio de que aún necesitamos un día, un mes, una vida, para afirmar nuestra diferencia, porque es el primer paso para afirmar nuestros derechos y para construir en igualdad.
Pero también es un recordatorio íntimo de cómo gestionamos lo que somos, después de todo, para mí, salir del armario siempre ha sido un acto de lealtad de cada una consigo misma. Y la deslealtad duele.
La invisibilidad es una traición que nos hacemos y que disfrazamos de variadas excusas: mis padres son mayores, la gente me rechazará, no creo en las etiquetas, es mi vida privada… Y no, no es tu vida privada. Tu vida privada es lo que haces en la cama, no tu orientación sexual.
El costo real de salir del armario (en un país donde no sea castigado con la cárcel o la muerte) casi nunca es tan significativo. En el peor de los casos te sacas de encima a la gente que no te quiere como eres, sino que sólo te quiere bajo sus condiciones: que seas lo que ellos quieren.
Cuando sales del armario cambias las cosas para ti y para los demás. Educas. Enseñas diversidad y respeto. Abres ojos, mentes y corazones. Hay personas que lo valoran al momento, otras se toman su tiempo.
Te conviertes en un referente para aquellas y aquellos que sienten miedo, vergüenza y rechazo hacia su propia homosexualidad.
Pero el beneficio más grande lo recibes tú. Es una decisión que pavimenta y aligera tu camino, que te conduce hacia dónde quieres y a vivir la vida que sueñas vivir. Es un acto de lealtad hacia ti misma, un acto de amor hacia quien eres. Influye en todas las otras áreas de tu existencia, puesto que rebaja miedos y entrena tu confianza y tu valentía, tu capacidad para sortear obstáculos y para creer en ti. Al final de eso se trata el Orgullo. No es Orgullo de ser lesbiana. Es Orgullo de ser tú y defenderlo.
Cada que leo un artículo tuyo con esta temática del “armario” me haces pensar que las cosas son mucho mas sencillas y no tan complejas como nos lo creamos muchas veces solo en nuestra cabeza. Me gusta mucho la forma en la que escribes. Gracias María por tus palabras.
Pienso que es sierto lo que escribe.. a simple vista todo se ve sencillo pero cuesta en realidad asumir lo que uno es realmente .yo tengo 32 años y me costo asumir mi bisexsualidad por q jamás me había enamorado de una mujer como lo estoy ahora ..es algo tan lindo fuerte y distinto .. y lo asumo y lo enfrento con quien sea q me quiera juzgar stoy dispuesta a defender mis derechos..
Lo único malo es que de la niña q me enamore tiene 27 años y no va asumir nunca su sexualidad por que es hijita de mama y papa ..su familia es muy tradicionalista y ella es profesional .. Y tiene un roce social s nivel alto …
Aunque ella se enamoro de mi no me habla no me mira me ve como muy poca cosa por que soy mas humilde y de esfuerzo..
Lo malo de esta historia es que nunca va a sumir su sexualidad por su orgullo que lo tiene por las nubes y le importa mucho el que dirán y me a hecho sufrir mucho con su indiferencia aun queriéndome como me kiere por que lo siento y se lo veo en su ojos.. No se ¿ que puedo yo hacer con esta situación ? Y que irá a ser de ella en un futuro próximo.. Con su vida?? CUESTA SALIR DEL ARMARIO..
GRACIAS MARÍA POR ESCRIBIR ESTOS ARTÍCULOS SUE ME HACEN VER MAS CLARA LA REALIDAD Y SENTIRME ORGULLOSA DE LO QUE SOY aun amando a una persona q no me corresponde …
Yo tengo 32 y aún no he salido del “armario”… Miedos, juicios, etc…me estan frenando bastante. Ando un poco perdida…
Disfruta de cada paso en este proceso de aceptaciòn y se conciente que tu vida te pertenece , mereces lo mejor y eso es hacer lo que sientes en cada momento. No pasa nada. No hacemos daño a nadie , a veces lo contrario, son los demás los que nos dañan. Ánimo a todas las mujeres que se encuentren en esta situaciòn , el miedo no esta para frenarnos sino para continuar con más fuerza
De repente, sentí que fue muy poco lo que es escribiste, pero pensandolo bien no es asi. No se necesitan mas palabras para poder entender que el verdadero cambio lo hacemos nosotras cuando simplemente valoramos lo que somos ante la sociedad. Es muy cierto cuando dices que solo es privado lo que hacemos en la cama, pero nuestra orientacion va con nosotros cada vez que salimos a la calle, caca vez que expresamos ideas, que salimos o hablamos con nuestra pareja en lugares publicos, pertenemos a algo que no podemos aislarnos, sino mostrarlo de la manera natural en la que somos.
No estoy de acuerdo.
Cada persona da su punto de vista o comentario de acuerdo a su experiencia, tengo 24 años y para mi salir del “closet” es hacer circo, maroma y teatro, simplemente con sacarle el tema a mi familia es un escándalo, vengo de una familia muy tradicionalista y lo que más importa son las reglas de la casa, mi familia (padre, madre y hermanos) son del pensamiento o idea de que todos pueden ser homosexuales pero menos sus hijos o mucho menos hermanas, el hecho de escuchar a mi madre decir que si soy lesbiana me olvide de mi familia simplemente esa idea me aterra, el no poder convivir, ver, tocar a mi familia es algo muy feo, soy la única mujer después de mi mamá y todos esperan que me casé o que salga con un muchacho “bien” que por cierto es un gran peso.
Podría salir del armario pero estoy segura que lo haré cuando tenga un patrimonio y un sustento propio, por lo tanto el salir con mujeres aún se llamara “salida con amigas”.
Y reitero no es tan fácil como la mayoría lo plantea.
Salir del armario no es fácil para nada, cada una de nosotras hubieramos querido hacerlo cuando tuvimos la certeza de nuestra homosexualidad…pero al principio te paran tantas cosas…
Entiendo perfectamente las dos partes (he estado en ese limbo), pero cuando tengas la oportunidad de hacerlo hazlo, es tan liberalizador.
Hace un año estrené puesto de trabajo y salí del armario hace años ya… y cuando me preguntan respondo con naturalidad y afortunadamente recibo más elogios que rechazo, y eso me da más fuerza todavía para saber que elegí el camino correcto.
A mi me sacó del armario mi ex después de varios años de relación. Y lo hizo sin respeto ninguno ante mi familia, amigos y compañeros de trabajo así que lo que yo puedo decir es que cada una elija lo que quiera hacer. El que para unas sea liberalizador no significa que lo sea para todo el mundo y es que la libertad de una siempre debe terminar donde empieza la libertad de otra.