Es bien sabido que existen unas cuantas organizaciones dispuestas a hacernos la vida imposible. No tienen suficiente con juzgar quiénes somos o cómo vivimos, sino que además se alían con “profesionales” en la eterna búsqueda de su santo grial: curar la homosexualidad. Médicos, curas, psicólogos y psiquiatras, bajo los preceptos de Dios (que, por lo general, casa bastante mal con la ciencia) realizan pseudoestudios para “confirmar” que la homosexualidad es un error de la naturaleza que deben corregir. Y sí, digo pseudoestudios, ya que parten de preceptos tan poco científicos como las creencias religiosas y acaban por maquillar los datos, no relevando su método de estudio, etcétera.
Así pues han surgido, especialmente en Estados Unidos, las organizaciones de “ex gays“, o lo que es lo mismo, homosexuales que se han “redimido” a través de la fe (y de terapias aberrantes) y han encontrado el glorioso camino a la heterosexualidad. No podrían faltar, por supuesto, las “ex lesbianas”, dispuestas a dar su testimonio acerca de cómo fueron abusadas de pequeñas o eran demasiado masculinas y eso les confundió (yo no digo que haya quien sí haya pasado por algo similar, pero no es el espectro general de las lesbianas).
En este sentido, nos encontramos con dos vertientes: la pseudocientífica y la religiosa. El auténtico peligro reside cuando la segunda se apodera de la primera. Tienen un discurso muy claro: se puede dejar de ser gay (lo gracioso es que nunca se puede dejar de ser heterosexual, sólo funciona en una dirección al parecer). Unos inculcan la fe cristiana y el amor de Dios como vía para alcanzar el fin mismo de la humanidad, una relación monógama que procree hijos como conejos. Por el otro lado, apoyan estas ideas mediante terapias, tratamientos y asociaciones que defienden estos métodos. Aquí van dos ejemplos de estas vertientes.
Charlene Coltran, una de estas “ex lesbianas” (y ex activista homosexual para más inri) relataba hace aproximadamente un año en la revista Venus los diez pasos necesarios para volver a la feliz vida heterosexual:
- Establecer y aceptar que la palabra de Dios es cierta.
- Buscar la verdad en las escrituras acerca de la homosexualidad (aquellas que seáis cristianas, os invito a que conozcáis a la asociación Crismhom, pues tienen una visión muy diferente de lo que dice la Biblia respecto a este tema).
- No resistir la llamada de Dios en tu vida (aquí ya empieza a repetirse un poco).
- Saber con certeza que eres amado por Dios.
- Decir sí (¿a qué exactamente? ¿A la heterosexualidad? ¿A cualquier hombre? ¿A los placeres que pueda otorgarte un falo erecto? Nunca lo sabremos).
- Hacer real tu salvación (y pregonarlo a los cuatro vientos).
- Experimentar el paraíso ahora (ni que una mujer no te hiciera alcanzarlo…).
- Caminar cuidadosamente para mantener el espíritu limpio.
- Hacer amistad con creyentes (ya sabes, por eso de que te laven el cerebro y tal).
- Mantenerse en contacto (no vaya a ser que por no llamar a tu amiga hetero creyente te den deseos impuros de arrancarle la bragas a alguna).
En el lado de la ciencia, se ha decidido llamar a estas terapias “terapias de reorientación sexual“, “terapia reparativa” o “de conversión”. Han variado a lo largo de los años y han probado con la modificación de conducta (muchas veces se puede cambiar una conducta, pero no el sentimiento que reside en el interior; así pues, tú puedes dejar de acostarte con mujeres, pero no quiere decir que hayas dejado de excitarte viendo un sugerente escote), terapia de aversión (la mayor aberración posible: provocarte sensaciones desagradables, como ganas de vomitar, mientras ves fotos de mujeres y, así, tu cuerpo asocia la visión de una mujer desnuda a esas sensaciones horribles; toda una delicia), el psicoanálisis (“Veamos, ¿de pequeña desnudaba a las muñecas? Eso claramente es el origen de su homosexualidad”) y otros métodos poco científicos como la oración y el consejo religioso (porque claro, un cura que ha hecho voto de castidad sabe qué es lo mejor para tu vida sexual).
Para retratar este punto, me gustaría que conocierais la historia de Lyn Duff. Esta periodista americana salió del armario a los 14 años. Su madre, preocupada por su orientación sexual, la internó sin su consentimiento en el Centro Psiquiátrico Rivendell, en West Jordan (Utah), donde estuvo 6 meses. Sufrió las terapias de conversión, la terapia aversiva (que consistía en ser forzada a ver pornografía lésbica mientras olía a amoniaco), hipnosis, drogas psicotrópicas, celda de aislamiento, mensajes que calificaban la homosexualidad como pecado, y, por supuesto, obligándola a llevar vestidos, castigándola sin motivo o acudiendo a terapias de grupo. Por suerte, consiguió salir de ahí para poder dar testimonio de aquel infierno.
No voy a molestarme en nombrar a todas las organizaciones que hay detrás de este ataque a la dignidad humana, pues son fáciles de encontrar por internet. Eso sí, me gustaría recalcar que la Asociación Americana de Psicología (una de las más importantes en el mundo), muchas organizaciones médicas, así como el Colegio Oficial de Psicólogos de España, condenan esta clase de terapias ya que no han demostrado ningún tipo de beneficio para la persona y sí que pueden resultar dañinas. Entiendo los motivos que pueden llevar a ciertas personas a querer dejar de ser homosexuales (admitámoslo, no siempre es fácil, hay que enfrentarse a muchas cosas y hay quien prefiere optar por la vía fácil), pero los profesionales no pueden inculcar sus preferencias inducidas por la religión sin tener una base científica que lo apoye. Estas prácticas son denunciables y condenables y os animo a todas a denunciarlas.
No puedo terminar este artículo sin hacer referencia a los movimientos de “ex ex gays“, o lo que es lo mismo, gente que se ha dado cuenta de que no pueden dejar de ser homosexuales y se han salido de las organizaciones que lo proclamaban. Hay muchos hombres que han ido sacando a la luz todas las prácticas que se han hecho, pero pocas han sido las mujeres que han alzado su voz. En la página de Beyond Ex Gay, una asociación que reúne a los supervivientes del movimiento ex gay, podréis encontrar algunos testimonios, eso sí, en inglés. Además, os dejo este vídeo de la gran película But I’m a Cheerleader que ahonda, de manera cómica, en las terapias de reconversión y en el movimiento “ex ex gay”.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=X_yjuTaRGx4[/youtube]
No dejes que otros te digan cómo vivir tu vida. Sé libre de vivir como quieras.
Aida Castaño – Visita mi blog A Vueltas Con El Sexo
¿Y no hay nada para curar la homofobia, la bifobia, la transfobia, la heterofobia, la tontería, la ignorancia, etc.?
Creo que acabarían antes 😀
Además ¿qué carayu tendrá que ver Dios en nuestra sexualidad? Esa gente siempre complicándole la vida a l@s demás. Qué fastidiosos son.
Y la verdad, yo tengo mis creencias y mis teorías pero ¡¡¡no las mezclo con el resto de las cosas!!!
La religión nada tiene que ver con la iglesia…
Hay formas de curar todo eso. Pero lleva trabajo y esfuerzo, una voluntad por parte de la sociedad, que desea no tener ignorantes, y por parte del ignorante, que debe reconocer que lo es…
Largo es el camino, ciertamente. Es una suerte estar amparados en España por la ilegalidad de estas puñetas.
… ah pues yo creo que Dios me ama! que me ha creado perfecta… estoy tratando de no resistir su llamada en mi vida y sé desde el fondo de mi consciencia que esa llamada es a ser lesbiana! Creo en su palabra (no en las interpretaciones erróneas) soy una buena persona y no lo digo yo lo dicen muchas personas por ahi (que pensarían si supieran que soy lesbiana?) Sé que el amor de Dios me salva, y sé que él me permitió conocer a la mejor mujer y LA AMO, LA AMO EN ÉL! (no en la religión) Mi espíritu está limpio… mis amigos son creyentes (alguno que otro gay)ah y por si todo eso fuera poco ella me hace experimentar el paríso y más allá de eso su sola compañía es un pedacito de cielo, y la presencia de Dios en mi vida!!! que me falta??? no sé pero es precisamente toooodos esos pasos que dan los que me hacen ser cada vez más consciente, más feliz y más agradecida con Dios de darme un don tan especial: SER LESBIANA, y poder por medio de él anunciar su Reino de AMOR, DE INCLUSIÓN Y DE VERDAD!
Jajaajajajajajajaaja, muy bueno
Conductismo aplicado, genial… El lunático de Skinner estaría muy orgulloso por cómo se aplica en la actualidad su barbarie… Si lo expuesto en La naranja mecánica resultaba inverosímil, esto confirma que la realidad siempre supera la ficción…
uff con lo que lloré viendo la peli de electroshock! Con estas cosas queda cada dia más claro que la iglesia es una secta y una de las grandes culpables de q el mundo vaya como va
Actualmente en los manuales de trastornos mentales CIE-10 y DSM-IV no figura ninguna enfermedad conocida como homosexualidad.
En anteriores ediciones si la había, hasta que se demostró que no es nunguna patologia. Los cristóides y otras alimañas aborregadas usan las versiones antiguas de estos manuales (donde la homosexualidad sí figuraba todavía como enfermedad mental) para justificar las terápias. Vamos, que es lo mismo que hoy en dia en la escuela se usen los manuscritos medievales que decían que la Tierra era plana para explicar geografía a los chavales…
vergonzoso!! ‘Terapias” creadas para abusar, traumatizar y revictimar… Juicios clínicos y términos sacados de la manga y todo vale si es “en nombre de dios” por qué no se encargan en hacer terapias contra la lgtbfobia?? Seguro que su dios se lo agradece más.. Gentuza
Soy doctora y a la vez tengo a Cristo en mi corazón, no se cómo hay gente que pueda decir que nadie te diga como vivir tu vida, simplemente creo que esta sociedad esta cada vez peor y es por la falta de apego a la moral, yo lo veo todos los días en el lugar de trabajo ninos descuidados y maltratados abandonados y que sufren por la vida desordenada de sus padres, y me dicen uds que no ocupamos orden en nuestras vidas? Qué si hacemos todo lo que queremos sin ninguna consciencia? No critiquen a los demás por querer hacer el bien, no digan que conocen a. Dios si no lo han dejado actuar en sus vidas, si sólo aceptan como verdd a todo lo que les conviene, y que bueno si es cierto lo que dicen y que Dios los perdona y los ama como son, y claro que Dios nos ama pero recuerden algo, Dios no puede estar con el pecado, y en eso se basa el sacrificio de Jesús que el diera su vida para poder estar libres en la presencia de Dios, entonces que si sucede lo contrario y no es completamente cierto lo que piensan? Para dónde iremos después de esta vida?
Hola Anónimo. Tu mensaje me ha dejado algo desconcertada a decir verdad, no entiendo bien tu postura.
¿Quieres decir que nosotras representamos el pecado? ¿Que Dios no nos ama por ser lesbianas? ¿Que esta clase de terapias están bien?
Siento decir que no estoy de acuerdo contigo. Para empezar, ¿por qué mezclar religión con ciencia? Son dos entes que deben permanecer separados por el bien del progreso.
En segundo lugar, en la Biblia no hay como tal pasajes en los que se castigue la homosexualidad y, aún habiéndolos, ¿por qué seguir los preceptos de hace 2000 años? Creo que la sociedad ha avanzado lo sufiente para discernir entre qué es cultural y qué no, y qué cosas se pueden llevar a cabo. Porque, que yo sepa, en muchos países está prohibido matar a alguien a pedradas, cosa que sí sale en la Biblia. Si quieres tener una visión con más amplitud sobre la religión católica, hay muchas entidades que divulgan la palabra de Jesús desde una perspectiva mucho más cristiana, es decir, desde el amor y no el odio. Crismhom, por ejemplo, es una entidad estupenda.
Por otro lado, como doctora me daría vergüenza practicar esta clase de terapias. No ofrecen ninguna garantía metodológica, no ofrecen resultados consistentes, y lo único que ha demostrado es que afectan más a la persona que si simplemente aceptara su homosexualidad. Como psicóloga, puedo decirte que estas terapias van en contra de muchas Asociaciones y Colegios médicos y psicológicos. En la Asociación Americana de Psicología (una de las más importantes del mundo), tiene mucha información al respecto: http://www.apa.org/pi/lgbt/
En tercer lugar, mezclas cosas que a priori no tienen nada que ver. ¿Niños maltratados, desamparados? Dime, ¿cuántos de esos son hijos de heterosexuales y cuántos de homosexuales? Si quieres ponerte una venda y filtrar según te parezca, adelante, pero que sepas
pero que sepas que no eres imparcial. De hecho, hay diversos estudios en los que se demuestra que hijos de padres homosexuales son iguales que sus congéneres. Es más, son incluso más respestuosos con la diversidad. Por supuesto, habrá de todo en la viña del señor, y habrá quien sea un mal padre y quien sea un buen padre. Pero eso no va en la orientación sexual, sino es la persona.
Para finalizar, sólo quería decirte que, si tan segura estás de tus opiniones, no hace falta usar un “anónimo”, ¿verdad?
https://sites.google.com/site/homosexualidadreligionyciencia/
Los textos, que supuestamente, condenan el homosexualismo NO son en realidad traducciones e interpretaciones fieles a los idiomas originales (hebreo y griego). Estas traducciones fueron realizadas por religiosos, quienes estando cargados de prejuicios contra la práctica homosexual (personas homofóbicas o por considerar dicha práctica antinatural) y por lo tanto aprovecharon la oportunidad de la traducción de las escrituras para apoyar las ideas homofóbicas, ya que, la realidad del caso, es que EN LA BIBLIA NO hay una posición clara y mucho menos condenatoria hacia la práctica del homosexualismo.
Investígalo usted mismo, no se crean todo lo que la religión le dice. Ahí le dejo un buen documento con contenido sobre el tema para que usted empiece a investigar
https://sites.google.com/site/homosexualidadreligionyciencia/
Los textos, que supuestamente, condenan el homosexualismo NO son en realidad traducciones e interpretaciones fieles a los idiomas originales (hebreo y griego). Estas traducciones fueron realizadas por religiosos, quienes estando cargados de prejuicios contra la práctica homosexual (personas homofóbicas o por considerar dicha práctica antinatural) y por lo tanto aprovecharon la oportunidad de la traducción de las escrituras para apoyar las ideas homofóbicas, ya que, la realidad del caso, es que EN LA BIBLIA NO hay una posición clara y mucho menos condenatoria hacia la práctica del homosexualismo.
Investígalo usted mismo, no se crean todo lo que la religión le dice. Ahí le dejo un buen documento con contenido sobre el tema para que usted empiece a investigar
https://sites.google.com/site/homosexualidadreligionyciencia/