Una pareja de lesbianas en Israel dijo que había sido “tratada como ciudadanas de segunda clase” después de luchar para que su estado como madres fuera reconocido en los certificados de nacimiento de sus hijos.
Smadar Peker-Nir y Hadas Peker-Nir, viven en Tel Aviv, y en una entrevista mostraban su nerviosismo y su enfado con las instituciones de su país al verse inmersas en un proceso burocrático absurdo para inscribir a sus hijos en el registro civil después de que éstos pasasen dos semanas, tras su nacimiento, en cuidados intensivos.
Al retrasarse en la inscripción, por la hospitalización, fue cuando se les pasó la fecha límite y se les ordenó seguir una orden de adopción, la cual ha tardado un año en ser aprobada.
Recibimos la adopción [orden] después de un año. Las mujeres heterosexuales pueden traer a cualquier hombre de la calle y registrarlo como el padre. Cuando queríamos ampliar la familia, recurrimos a altos funcionarios del Ministerio de Salud y nadie nos respondió.
La pareja decidió llevar su caso a juicio. El Tribunal de Familia de Tel Aviv ordenó que el estado reconociera a ambas mujeres como madres legales, y ordenó al gobierno indemnizar a la pareja con 3.000 shekels (algo más de 700€)) por costos legales.
Lo único que debe preocupar al gobierno es el bien de los niños, no la burocracia. Necesitábamos volar a los Estados Unidos para casarnos porque en Israel no podíamos. Después de dar a luz a nuestro primer hijo, pasamos por un largo período de burocracia para recibir una orden de adopción, a pesar de que habíamos planeado ser madres como pareja.
Nos vimos con dos bebés prematuros luchando por sus vidas, pero para el Estado, lo importante fue cuando presentamos los formularios.
Lamentándolo mucho, en España, “país avanzado en derechos” vivimos esa situación a diario. Es más, de ninguna de las maneras puedes filiar a un bebé a nombre de dos mujeres si no estás casada legalmente. El único caso en el que no sería necesario casarse sería en el que la madre gestante filiase al bebé como madre soltera y luego la no gestante iniciase un proceso de adopción (siempre y cuando la gestante esté de acuerdo).
¿Para cuándo la Igualdad Real? ¿Cómo es posible que una madre heterosexual pueda señalar a cualquier hombre como el padre de su hijo, lo sea o no, y una madre lesbiana deba pasar por semejante proceso burocrático luchando para demostrar que los niños tienen otra mamá?
[…] en Ecuador hace años, donde han nacido sus hijos (Satya, de seis años, y Arundel, de dos) y donde solo una de ellas ha podido reconocerlos legalmente ya que allí no es legal el matrimonio igualitario ni la adopación […]