La ex jugadora de la Selección Española de fútbol, Ángeles Parejo, que fue estrella en la Eurocopa de 1997, ha tenido la valentía de hablar abiertamente sobre las vejaciones machistas que sufrió en su paso por la Selección, evidenciando así que la lucha que abanderan hoy las jugadoras es solo la punta del iceberg de un problema que llevan muchos años viviendo.
“O te acuestas conmigo o le digo a todo el mundo que eres lesbiana’, me dijo el presidente de un club. ‘Prefiero ser lesbiana y que la gente lo sepa que acostarme con usted’, le respondí”, cuenta en una entrevista a Marca.
Ángeles Parejo (en la foto de portada junto a su hermana Isabel), pasó a la historia por marcar el primer gol de España en un Torneo Internacional, en 1997. Comenzó a jugar al fútbol con los niños del barrio, diciendo que se llamaba Ángel, para así frenar el machismo que imperaba en las calles con respecto a qué sexo debía manejar la pelota y cuál no.
Su padre siempre creyó en ella así que la apuntó a una Escuela de Fútbol donde rápidamente la ficharía el Sabadell. Su hermana gemela, Isabel, también comenzó a destacar y ambas se convirtieron en estrellas. A los 19 años las fichó el Torino y así se marcharon a Italia, donde residen hasta hoy.
A los 17 años comenzó a jugar en la Selección Española. “Jugar con la selección fue un sueño que hice realidad gracias a mi familia. A mi padre le gustaba mucho el fútbol y mi madre se limitaba a vernos felices. Siempre me apoyaron de manera incondicional”.
“Llevábamos la equipación de la Sub’17 masculina del año anterior. La camiseta me sobraba por todas partes y al pantalón le tenía que dar tres vueltas porque me quedaba por debajo de las rodillas. En aquel momento no lo sabíamos, pero nos lo dijeron tiempo después”, denuncia. “Después de aquel torneo escribimos una carta a la Federación para protestar por las condiciones que teníamos y el machismo que sufríamos, pero no nos escucharon”. Las condiciones eran tan nefastas que solo jugó dos partidos más porque la Federación ni siquiera quería pagarles los viajes.
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Jugaron en Italia varios años. Actualmente se dedican a formar a las nuevas generaciones de futbolistas. Dicen ser fanáticas de la Selección española.
“Cuando vuelva a España en Navidades quiero ir a ver un partido del Barcelona”, cuenta Ángeles. “De la selección no me pierdo un partido. Disfruté mucho durante el Mundial porque jugaron de manera brillante y demostraron ser un gran equipo: Aitana, Salma, Olga, Jenni… difícil destacar a una”, afirma quien dice verse reflejada en Alexia Putellas. “Las dos somos catalanas, zurdas, con carisma”. Y luchadoras, sin duda.