Ya hemos visto Nyad, la nueva película de Netflix que narra una historia fascinante y real de una mujer lesbiana que debería ser uno de nuestros máximos referentes deportivos: Diana Nyad.
No es una historia de amor lésbica, pero lo es. No esperes ver besos, sexo o declaraciones sentimentales. Porque no es una historia de amor, pero lo es. Pone foco en lo que para muchas de nosotras son nuestras relaciones más prósperas y significativas a lo largo de la vida: las historias con nuestras mejores amigas lesbianas.
Annette Bening da vida a Diana Nyad, una nadadora profesional que intentó sin éxito, a los 35 años, cruzar a nado lo que podría ser aún más complicado que un Everest acuático: cruzar desde Cuba hasta Florida nadando sin parar. Unas 70 horas según los cálculos de entonces.
Jodie Foster da vida a Bonnie Stoll, su mejor amiga y entrenadora. Alguien con quien “tuvo algo de un segundo hace un millón de años”, como explica Diana a una chica con la que intentaba ligar.
¿Cuántas de nosotras no tenemos como compañeras de vida a esas amigas lesbianas, ex novias, ex rollos, que se han quedado y convertido en nuestra familia? Es el caso de Diana y Bonnie, algo especial que las espectadoras lesbianas entendemos perfectamente.
La película, de Elizabeth Chai Vasarhelyi y Jimmy Chin, está basada en el libro autobiográfico de la nadadora. En dos horas, que se pasan muy rápido, vemos a Diana, a sus 64 años, y después de cuatro intentándolo con una determinación apabullante, consigue cumplir su sueño y establecer un récord brutal. Cruzar a nado y en solo 54 horas, sin jaula para tiburones, los 168 kilómetros que separan La Habana de Key West.
Diana Nyad no solo consiguió un fantástico logro deportivo. Se convirtió en una celebridad lésbica con todo lo que esto implica para la lucha por la visibilidad. Cuando llegó a la orilla, sin ser casi capaz de mantenerse en pie, la esperaba mucha gente, y mucha gente con banderas LGTB, y esa escena es realmente conmovedora.
No dejes de verla, no solo por conocer más a fondo a este referente, sino que también por los mensajes que entrega la historia, resumido en el poema de Mary Oliver: ¿No es verdad que todo al final se muere, y tan pronto?
Dime, ¿qué piensas hacer con tu única, salvaje y preciosa vida?