Sí, es el mes del Orgullo. Tiempo de reivindicar y a la vez celebrar los derechos que hemos conseguido. Pero también es tiempo de darnos más de un cabezazo en la pared. No, el mundo no es tan evolucionado como nos gusta creer. A veces salimos de nuestras burbujas y nos encontramos con la lesbofobia, deseosa de acallar nuestras voces.
Las protagonistas de esta triste historia son las futbolista Jenni Hermoso y Misa Rodríguez. Jenni fue elegida por la revista Time una de las 100 personas más influyentes del mundo después de ser la cara visible de la revolución del fútbol femenino en España.
Jenni salió del armario hace unos meses en el programa Planeta Calleja. “Nunca lo llegué a decir, nunca he dicho abiertamente que me gustan las chicas. Es algo que era tabú siempre. Nunca ha hecho falta preguntar, mis padres lo sabían”, contó, además de agregar que estaba soltera.
Por otro lado tenemos a Misa Rodríguez, futbolista del Real Madrid. Durante años se ha rumoreado que tiene novia, y ella ni se ha escondido ni se ha pronunciado al respecto.
Jenni y Misa, ¿son amigas, novias, amantes? No sabemos. Y, la verdad, da absolutamente igual. Simplemente son dos chicas que se han ido juntas de vacaciones. Ese simple hecho ha levantado una oleada de lesbofobia y machismo que nos deja heladas.
Los lesbófobos de las cavernas defendían al ex seleccionador Jorge Vilda. “Vilda tenía razón. Lo de dejar la puerta abierta en las concentraciones era por algo” o “las tijeras fueras del vestuario”.
La foto se ambas en un barco, abrazadas y en bikini, se ha utilizado para pedir el “cierre” de la Selección Femenina de fútbol. Sí… así de absurdo. “Ojalá Florentino cierre la sección de fútbol femenino. A parte de ser deficitaria es una vergüenza para el club”, entre tantos insultos a las dos brillantes jugadoras.
La Selección Española ganó el Mundial del fútbol femenino, la Liga de Naciones y se clasificó para la Eurocopa. Pero el arrollador talento da exactamente igual a quienes ponen por delante el odio y la ignorancia, sobre todo en un campo en el que la visibilidad lésbica es tan potente. Fútbol y visibilidad. Cómo escuece a los intolerantes… Los insultos y el acoso recibidos son la muestra de que este Orgullo necesitamos aún más seguir uniendo nuestras voces y gritando muy alto: jamás podréis con nosotras.