La dura vida de la primera mujer que se declaró lesbiana en Italia

Mariasilvia Spolato fue tan valiente y tan luchadora que su vida inspira y conmueve. Tal como dijo Rina Macrelli en la revista Effe en 1983: “Se atrevió a firmar su lesbianismo con su nombre y apellido“. 

Mariasilvia, que ha fallecido hace unos días, a sus 83 años de edad, era una mujer brillante que se había graduado con honores y ejercía como profesora de matemáticas en la universidad. Pero el día que decidió hablar públicamente de su homosexualidad, y desde entonces ser reconocida como la primer mujer italiana que decía abiertamente que era lesbiana, lo perdió todo. A su pareja, a su familia, a sus amigos, y su trabajo. A pesar de ser brillante, la despidieron con la excusa de “indignidad”, al hablar de su sexualidad. 

VER: No es mi amiga, es mi esposa. Nuestras batallas por la visibilidad lésbica

Todo comenzó en 1972, Mariasilvia Spolato participó en una marcha feminista en Roma,  en el Día de la MujerEn su pancarta, la que llevaba con mucho orgullo, decía: Liberación homosexual. 

Tan solo eso causó un escándalo que la llevó a perder todo. El apoyo familiar y social fue una pérdida muy dura. Pero el despido de su trabajo fue nefasto. Mariasilvia se quedó sin dinero, y al no tener red de apoyo, comenzó a vivir en la calle. 

Un año antes de la manifestación había creado la revista “Fuori”, junto con Angelo Pezzana. La revista fue el punto de partida para lo que más tarde fue la primera organización LGTB del país. 

La vida de Mariasilvia fue una lucha incansable, lucha por la visibilidad lésbica, por derechos para el colectivo LGTB y el respeto y la tolerancia por la diversidad sexual y de género.

Apasionada de la fotografía, publicó la primera poesía lesbiana del neofeminismo italiano, y un libro que todavía se considera una biblia de derechos civiles, “Los movimientos de liberación homosexual”.

Durante muchos años esta excepcional mujer estuvo viviendo en la calle. Recibió ayuda de ONGs, como Cáritas Italia, que la recibió en un refugio después de una infección sufrida en una pierna. 

Comparte este artículo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio