La preciosa experiencia de una lactancia compartida
Joao y Joaquim apenas acaban de nacer y ya son virales en las redes sociales. Sus dos madres, Paty y Lili, tienen una cuenta en Instagram en la que han seguido su embarazo y parto. Al nacer publicaron una foto de ellas y sus gemelos siendo amamantados por ambas (una a cada bebé). El impacto es de miles de likes y comentarios.
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No son nuevas las fotos en las que una pareja de lesbianas posa con sus bebés recién nacidos (recordamos que el número de embarazos múltiples es cada vez mayor debido a múltiples factores), pero no es tan habitual las que implican la lactancia compartida. ¿En qué consiste? Pues básicamente en que la madre no gestante pasa por un proceso de hormonación para que llegado el momento del nacimiento (o llegada del bebé) pueda amamantar también. Hay quien dice que así se genera también un vínculo físico con la criatura, aunque es cuestión de opiniones. Lo que es seguro es que esos bebés están recibiendo mucho, mucho amor por parte de sus dos mamis.
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VER: Yo no soy la madre gestante
Con esto se demuestra que no es necesario pasar por un embarazo y un parto si no se desea para poder vivir la lactancia, como les pasó a Miriam y Cristina.
“Mi mujer y yo íbamos a tener una bebé que se llamaría Naira. Hablamos con varias matronas del típico curso de preparación al parto, también hablamos con algunas asesoras de lactancia, leí sobre el tema de la lactancia compartida y al final, si quería conseguir relactar, es decir, que me saliera leche del pecho, lo que tenía que hacer era ponerme un sacaleches varias veces al día. Como ya sólo quedaba un mes para que naciera Naira, tenía que haberme puesto el sacaleches cada 2 horas. Me recomendaron uno hospitalario doble. Era más potente y se podía alquilar. También me hablaron de unas pastillas que me podían ayudar”.
VER: Lactancia inducida: la preciosa historia de dos madres lesbianas
No le gustan los chupetes. Cosa que veo normal. Con cuatro tetas, ¿quién quiere un chupete?
Espero que esta historia os haya sacado también una sonrisa y la ilusión de ver que con ganas, paciencia y mucho amor, se puede conseguir cualquier cosa que una se proponga. Si buscas más información de la lactancia inducida, no dejes de leer este artículo, de la revista Oveja Rosa, un espacio para las familias LGTB.