La famosa película lésbica “Carol” está basada en el betseller de ficción del mismo nombre. Pero, sin duda, fueron muchísimas las historias reales semejantes a la que relata este libro y película. Muchas que desconocemos.
Sin embargo hay una historia que llegó a oídos de todo el mundo. Se trata de la aristócrata multimillonaria lesbiana Gloria Morgan Vanderbilt y su lucha por la custodia de su hija.
Dicha hija, Gloria Vanderbilt, contaba recientemente a la revista Vanidades el desconcierto con el que vio como las relaciones homosexuales de su madre se hicieron públicas en 1934. Y es que Gloria fue llevada a juicio cuando su hija tenía 10 años por la tía paterna de la pequeña, que luchó para quitarle la custodia de la pequeña, alegando “deficiencias morales” por parte de la madre (¿te suena de Carol?).
Gloria Morgan siempre estaba rodeada de “hombres guapos, apuestos y con títulos” afirma su hija, pero la realidad estaba detrás de aquella postal de vida socialmente aceptable, e iba a salir a la luz.
Gloria tenía una relación con Nada Milford Haven, (foto de ambas a la izquierda) que se hizo repentinamente famosa y que fue utilizada en su contra.
El juicio fue tan escandaloso que el juez mandó salir varias veces a los asistentes de la sala para poder escuchar en calma a las protagonistas. Muchos testigos que trajo la tía de la niña aseguraron que Gloria no era apta para criar a una niña. La batalla legal y el juicio social fueron feroces “ya que ser gay era un escándalo terrible y un crimen que justificaba la privación de libertad, casi como un asesinato” afirma su hija, que también fue interrogada en el juicio. La pequeña Gloria no sabía entonces lo que era ser lesbiana, y le parecía algo como una enfermedad que ella pudiera también padecer. Tenía miedo de que su madre acabara en la cárcel o de ser juzgada ella misma. Los abogados usaron muy bien esa baza.
(Foto izquierda: Gloria Morgan junto a su hermana)
Finalmente Morgan-Vanderbilt perdió la batalla y Gloria quedó bajo la tutela de su tía Gertrude. Años después, la miniserie Little Gloria…Happy at last, retrataría la odisea de juicios y herencias que tuvo que vivir.
Hoy Gloria recuerda a su madre con cariño, y su propio hijo, y nieto de Gloria Morgan-Vanderbilt, es homosexual, además de un reconocido periodista: Anderson Cooper.
Una triste historia increíblemente semejante a la de la película Carol, con una protagonista igualmente famosa tanto por su riqueza como por su belleza.
Ay ! Chicas ! Si supieran como se dificulta la lectura del artículo con la franja negra en medio del texto…!
Saludos desde Buenos Aires