Lesbianas y gatos. ¡Una relación en peligro!

En el mundo gatuno existe un gran enigma: ¿por qué casi siempre son adoptados por lesbianas? El segundo enigma en el mundo felino es ¿por qué esa madre adoptiva tarda tan poco en llevar mujeres a vivir a casa después de liarse con ellas? Pero hoy nos ocuparemos del primero.

Lesbianas y gatos. Es una asimilación tan arraigada como la de lesbianas y pelo corto, lesbianas y camisas de cuadro. Lesbianas y fútbol.

¿De dónde viene todo esto? Si indagamos en la cultura popular, antiguamente se decía que las solteronas se llenaban de gatos. Y ya sabemos que muchas de esas mujeres que no querían casarse con hombres pertenecían a nuestra desviada condición.

Si nos ponemos mitológicas, la diosa egipcia Bastet, cuerpo de mujer, cabeza de gata, representaba la armonía, la felicidad y la alegría de vivir. Los Celtas creían que los ojos de los gatos eran una puerta abierta al mundo de las hadas.

En muchas culturas los gatos eran venerados como símbolos de amor y alegría. Todo hasta que a la Iglesia se le ocurrió que eran demonios y comenzó a perseguirlos como si no hubiera un mañana. A tal punto llegó todo que en las noches de San Juan se hizo costumbre observar como espectáculo la quema de gatos. Se les atribuía características diabólicas y se les relacionaba con las brujas. Incluso el Papa Clemente acabó con los Caballeros Templarios acusándolos de homosexualidad y adoración al gato.

Lesbianas y gatos. Perseguidos y envueltos en dramas. Empiezan las coincidencias. No obstante, se han registrado casos de gatos que odian a las lesbianas. O a lo que más se parece a una…

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La emancipación de las lesbianas de sus propios estereotipos está poniendo en peligro la relación Bollera-Gato. Ya son miles los casos registrados de lesbianas que en lugar de acariciar un indiferente felino se inclinan por arrojar una y otra vez una pelota a un perro. Lesbianas y perros, abundan en parques y terrazas. Incluso en la redacción de MíraLES los porcentajes son alarmantes. El 70% de las mascotas… ¡son perros!

Y tú, ¿eres de gatos o de perros?

 

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32 comentarios en “Lesbianas y gatos. ¡Una relación en peligro!”

  1. A mí sinceramente siempre me han gustado toda clase de animales, desde las arañas hasta el elefante xD pero ahora en serio, hablando domésticamente, aunque en casa tenemos hurones, perros y gatos incluso dos ocas jajaja.Mi cuarto siempre acaba inundandose de los mininos de la casa…será que sienten mi gran afecto hacia ellos.
    Un saludo a todo el equipo Mirales, hacéis un gran trabajo.

      1. Pues, vivimos a las afueras, en una casa de campo, con algo de terreno, entonces podemos convivir bien con ellos sin que se nos echen encima. XD
        Un saludo

    1. Eso me recuerda cuando vivía en casa de mi papá, siempre llena de animales pero ahora en mi departamento solo tengo un gatito.

  2. Yo no tengo perro ni gato. Aunque si que es cierto que prefiero las gatas!!! Lo más cerca es el gato de mi abuela al que le tengo muchisimo cariño

  3. Yo soy más de perros, el gato es más independiente, apenas obedece ordenes. Pero he de decir q últimamente tengo a una gata q me esta haciendo cambiar de idea.

  4. No es la relación bollo-gato la que está en peligro, sino el mundo como lo conocemos! Este es uno de los detalles que nos alertan de que los mayas, quizá, no estaba tan equivocados…

  5. yo soy de gatos, los adoro, son tan elegantes, peculiares, enigmáticos, tienen tanta personalidad, son tan inteligentes y tan suaves!! jeje pero hace dos años que recogí de un cuartel a un labrador que estaba enfermo y abandonado, me lo traje a casa para cuidarlo en su primer año de vida y que se recuperara y se sociabilizara pero nos robó el corazón a mi novia y a mi y ahora soy de perros y gatos. Quiero muchísimo a mi gata pero es que a mi perro…me lo comía!!

  6. Digamos que el gato es mi animal-totem, me siento muy identificada con él. Si no fuera porque mi madre tiene asma al epitélio de gato, tendría una gata negra, una mini-pantera.

  7. A pesar de la fascinación que me provocan los grandes felinos, sus primos caseros me son indiferentes. Bueno no, indiferentes no, porque me acuerdo de su puñetera madre cada vez que alguno de ellos se pasea todo señoritingo por la tapia de mi casa poniendo frenéticos a mis adorables y fieles perretes. Si, lo reconozco, soy del clan canino de toda la vida. Mimosos, fieles, juguetones,protectores y nunca nadie se alegrará tanto de verte entrar por la puerta como ellos. ¿que más se puede pedir? Además los míos (mastines del tamaño de un caballo) auyentan a los testigos de Jehová, a los vendedores ambulantes y a las vecinas molestas. Ah! y me pastorean a las visitas para que no se me dispersen por el jardín XD

      1. Juassssssssssss!!!!

        Es buenísimo!!! Y sí, reconozco taaaaaaantaas cosas de Rambo es mis chuchos. Pero como ser perteneciente a una raza cuyos miembros a la mínima ocasión se dedican con auténtico deleíte y fruición a sacarse los mocos con el dedo (y algún caso comérselos con cara de gustito), rascarse el culo, el interior del pabellón auditivo (muchas veces con la misma mano), no lavarse las manos después de ir al lavabo (y meter esas pezuñas sin pudor después en el cuenco de los frutos secos del bar) y un montón de cochinadas más que no voy a enumerar por no provocar arcadas al personal, creo que no tengo el más mínimo derecho a quejarme de las costumbres higiénicas de mis compañeros caninos, la verdad. Los humanos a veces somos mucho peores que ellos. 😉

  8. Gatos… amo a todos los animales pero adoro un gato al que acariciar en una tarde lluviosa mientras me acurruco en el sofá… las mujeres entran y salen de mi vida, pero mi gato siempre estará ahí…

  9. La perra strikes back

    ¿Para que adoptar a un gato si siempre puedes encontrar a una perra con dos patas que te haga perrerías en todos los sentidos y encima con habilidades felinas, como por ejemplo, atacarte a traición? XD
    Me gustan los animales, pero si no dispones de tiempo (ni dinero) para ellos…

    Un saludo de la perra 😀

    A.

  10. Jajajaja muy bueno el artículo, como todo lo que hacéis. Si por mi fuera tendría un zoo, pero ni mis padres ni mi novia me dejan. Ahora mismo soy la orgullosa mami de una gatita (que creo que también es bollo porque es súper borde jeje) pero tuve una mini yorkshire a la que adoré.

  11. gatos definitivamente , en mi infancia siempre tuve al menos una gata , y en la adolescencia tuve 25 mascotas felinas al mismo tiempo, bueno la mitad eran de mi padre , hasta que la universidad y la muerte de mi padre me obligo a buscarles hogares y solo me quede con mi gata negra que vivió 16 años conmigo la encontré abandonada en frente de mi primaria y murió en mi primer año de derecho a falta de felinos una tortuga es aceptable un cánido no no , salvo ,los chihuahuas tal vez .

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