La estadounidense, activista lesbiana, se alza con el galardón femenino a la mejor futbolista de 2019
Megan Rapinoe, es la capitana de la selección nacional de Estados Unidos e incansable luchadora por los derechos de gais, lesbianas y todo el colectivo LGTBI. Ahora, se alza con el Balón de Oro femenino 2019, después de haber ganado el de mejor jugadora en el Mundial. La jugadora del Reign FC sucede a la noruega Ada Hegerberg que ganó la primera edición en su nuevo formato, haciéndose un hueco en la historia del fútbol como segunda ganadora de este galardón en modalidad femenina.
Megan ha sido la ganadora entre las 20 candidatas al Oro, entre las cuales no había ninguna española, aunque sí dos jugadoras del Tacon (Kosovare Asllani y Sofia Jakobsson), una del Barcelona (Lieke Martens) y otra del Atlético de Madrid (Sari van Veenendal).
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No es la primera vez que hace historia, como sabéis, pues en el pasado Mundial de Francia fue nombrada ‘Mejor jugadora’ al marcar seis goles y tres asistencias; números que le han servido para hacerse con el Balón de Oro, la Bota de Oro y ese premio a la mejor jugadora del Mundial. Sin olvidarnos de que levantó la Copa del Mundo junto a sus compañeras de la selección estadounidense.
La norteamericana se ha convertido en un icono mundial fuera del terreno de juego gracias a su lucha en favor de los derechos de las lesbianas, los gais, los trans, los bisexuales, las personas negras y racializadas en general, entre otras minorías.
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La centrocampista no pudo acudir a la Gala (una pena, pues no habría encantado ver un discurso en directo), pero grabó un vídeo que pudieron ver todas las personas asistentes y quienes estábamos en casa esperando el resultado. En el vídeo podemos ver la recogida de su homónimo masculino, Lionel Messi, y en el segundo 53 a la estadounidense de pelo morado que nos ha conquistado (incluso a las que no nos gusta el fútbol).