Mujer, siéntete orgullosa. Que nadie más que tú ha llevado a cabo tu vida de esta manera en la que lo has hecho.
Junio es el mes del Orgullo. El controvertido mes del Orgullo. A algunas gusta, a otras no. Es el mes donde muchas lesbianas, gays, bisexuales, y transexuales salimos a la calle y a las manifestaciones por varios motivos: porque nos sentimos felices de ser quienes somos, porque queremos ser visibles, porque es nuestra forma de agradecer a todos aquellos que durante décadas aguantaron insultos, miradas y pedradas cuando luchaban por conseguir nuestra libertad y los derechos que tenemos hoy. También salimos a la calle para enviar un mensaje de apoyo a todas esas mujeres y esos hombres que viven en países donde deben esconderse, fingir y vivir al margen de la ley.
Mujer, siéntete orgullosa. Y no sólo por ser lesbiana, sino por la forma en que has llevado tu vida. Eres una ganadora.
No es fácil ser diferente. No es fácil sentir que lo que pasa dentro de ti no se parece a lo que le sucede a las niñas que te rodean. Mirar a todos lados y no encontrar referentes. Ver que la mayoría de los libros y las películas acaban con el amor de un hombre y una mujer.
No es fácil crecer y aguantar la presión. La forma en que te vistes, la forma en que llevas el pelo. Los novios, las conquistas, el sexo, el amor.
No es fácil ser diferente, pensar que quizás no hay nadie como tú y aún así atreverte a declarar tu amor a otra chica. Tampoco es fácil decir a tus padres y a tu familia que no serás lo que ellos esperaban que fueras.
Mujer, siéntete orgullosa, porque a veces ha sido difícil. Ha dolido. En ocasiones no te han entendido, te han acusado de decepcionar, incluso han llorado por ti. Has visto gente alejarse, volver.
Y por lo mismo, porque a veces no ha sido fácil y otras no lo serán, siéntete orgullosa por todos esos momentos en que has dicho: “Soy lesbiana”, “Tengo novia”, “Me gustan las mujeres”, por cada vez que has cogido la mano de una chica o has dado un beso en público, haciendo caso omiso de las miradas y comentarios.
Mujer, siéntete orgullosa. Porque ser lesbiana no es sólo un aspecto más de tu vida. Es algo que ha condicionado tus pequeñas batallas y tus grandes victorias. Porque tus ganas de ser libre, de ser tú misma, de amar a quien has querido amar, te han convertido en la mujer que ahora eres.
Los “qué podría haber pasado” no existen, los “y si hubiera” menos. En este momento estás viviendo la creación de lo que tú como dramaturga, directora, escultora, pintora, diseñadora de tu propia vida has creado para ti. ¿Te gusta tu vida? ¿Te sientes más o menos orgullosa? Afortunadamente, todo lo que vivas a continuación, depende de ti.
Enhorabuena por ser mujeres de acción, que identificáis uno de los problemas clave, -la falta de referencias, falta de voz y en consecuencia falta de visibilidad- y abordáis la tarea. Tal y como dices, no es fácil, y duele, pero no podemos -ni queremos- renunciar a nosotras mismas: es nuestra naturaleza. Fuerza y adelante
Una vez más, gracias.
De nada 🙂
Hoy 3 de junio he leido en EL Pais la cr’onica acerca de Dolores Vazquez, que sufri’o el Salvador escarnio y la carcel acusada falsamente del asesinato de
Rocio Waninkof. Esta mujer es un ejemplo de injusticia y linchamiento social poru ser lesbiana: solo la providencia (el descubrimiento por casualidad del verdadero asesino) conllevo que fuera excarcelada. Su culpa era ser lesbiana y de hechuras a no prototipicamente femeninas, y ser tambien una mujer orgullosa, algo imperdonable. Hoy vive en londres y segun los siquiatras ha perdido su personalidad hasta quedarse en un 35 por ciento de lo que ella era. Ahora quecllega el 28 creovque habria que hacer un homenaje de apoyo y carinoca esta victima de la pacateria secular espanola
Tienes toda la razón, Haizea, el caso de Dolores Vázquez fue un auténtico linchamiento. Una mujer condenada sin pruebas, sólo por su masculinidad y su lesbianismo. De ahí la necesidad de ser visibles, de normalizar nuestros afectos, para que casos como este no se repitan nunca más.
Me he emocionado con varias partes del maravilloso artículo…No podría expresarlo mejor, me lo llevo a mi muro de fb 🙂 porque si, me suento orgullosa por librar y ganar estas pequeñas batallas con sus inexplicables y absurdas consecuencias malas entre mis grandes batallas de la vida
Muchas gracias Aroa!! Un besazo
Gracias, Mª Jesús. Como siempre, un editorial emocionante, motivador, que inspira y que nos invita a disfrutar de lo que somos en libertad.
Este año sí espero que nada falle para que yo pueda estar con vosotr@s y la pancarta de MíraLES, porque he visto crecer este medio tan necesario y tan bonito, hecho x nosotras para nosotras, y eso es un lujo, un lujo de verdad.
Nos invitas a sentirnos Orgullosas este mes de junio y yo te aseguro que lo estoy y así me siento: Orgullosa, por haber vivido los mejores momentos de mi vida, a mis treinta años, junto a mujeres increíbles, inolvidables, que me han aportado mucho y a las que he tenido la suerte de amar. Un abrazo,
Sofía (amiga de Rocío y Bea)
Muchas gracias por tus palabras Sofía! Te esperamos en la manifestación. Un beso!!
Porque ser lesbiana no es sólo un aspecto más de tu vida. Es algo que ha condicionado tus pequeñas batallas y tus grandes victorias. Porque tus ganas de ser libre, de ser tú misma, de amar a quien has querido amar, te han convertido en la mujer que ahora eres…
GRACIAS ESA PARTE ME ENCANTO… NO ES UN ASPECTO DE MI VIDA… ES LO QUE SOY! ES LO QUE HE ACEPTADO Y ES UN DON! QUE PUEDO PONER AL SERVICIO PARA QUE MUCHAS MUJERES MÁS NO ABANDONEN SU LUCHA! Es un proceso naciente en el que no quiero detenerme… ESTA SOY YO!
Hola, con vuestro permiso, comparto en mi fb y publico en mi blog , por supuesto, diciendo quien es la autora del artículo. Muchas gracias.
UN abrazo
Cristina
Gracias por escribir este tipo de artículos que nos dan a muchas un estímulo para continuar librando esas pequeñas batallas diarias que no buscan más que la libertad.
me siento orgullosa de mis amigas tortilleras