Otis ha nacido en Reino Unido gracias a una técnica pionera
Otis es un bebé de poco más de dos meses, nació el pasado 30 de septiembre en un hospital de Essex, y podemos decir que se ha gestado en el útero de sus dos madres, una pareja de lesbianas que han sido de las primeras en probar una técnica llamada maternidad compatida.
Lo más parecido hasta ahora era el método ROPA, pero esta nueva técnica, realizada en la London Women’s Clinic, va un poco más allá, ya que la mujer que dona el óvulo es también la que lo gesta en su útero durante las primeras 18 horas después de la fertilización, en lugar de hacerlo en el laboratorio. Después de esas horas, el embrión es transferido a la otra madre que finalizará el embarazo y dará a luz.
VER: Un bebé en EEUU nacido del vientre de sus dos madres lesbianas
Es una técnica revolucionaria, si para vosotras es importante la cuestión biológica o sentís la necesidad de llevar a vuestro bebé dentro, pero no es la primera vez que esto sucede. La técnica se llama AneVivo y ya en 2016 la clínica IVI Bilbao la llevó a cabo. La clínica logró el nacimiento de un bebé mediante esta técnica que permite la fecundación y el desarrollo temprano del embrión en el útero.
El proceso consiste en la introducción de los óvulos y espermatozoides unidos en el dispositivo intrauterino para que la fecundación y el posterior desarrollo embrionario se produzca en el útero. Posteriormente, se retira el dispositivo y se procede a la selección de los mejores embriones que se introducirán de nuevo en el útero materno. Marcos Ferrando, director médico de IVI Bilbao nos cuenta que: “Este método permite que el embrión sea fecundado y se desarrolle desde las primeras horas en su medio natural y en las mismas condiciones de luz, temperatura y nutrientes que tendría si hubiera sido concebido de manera natural. Desde el punto de vista psicológico permite a los padres acercarse más al proceso de reproducción asistida”.
Estas mamás de Reino Unido son Jasmine Francis-Smith, de 28 años, y su esposa Donna Francis-Smith, de 30 y, en su caso, a Donna le extrajeron un óvulo que se fecundó en el laboratorio con esperma de donante para después implantarlo en su propio útero para que lo gestara durante las primeras 18 horas y después lo transfirieron al útero de Jasmine.
Un portavoz de la London Women’s Clinic, que llevó a cabo el procedimiento, dijo que esto no solo les permite a ambas partes una “participación práctica y emocional en el embarazo, sino que también proporciona al embrión nutrientes importantes y otros componentes en un entorno natural y materno”
“El procedimiento realmente nos hizo a mí y a Donna sentirnos bastante iguales en todo el proceso y nos ha acercado emocionalmente. Ahora que Otis ha nacido sano y salvo, nos sentimos una verdadera familia. Si tuviéramos que pasar por el proceso nuevamente, no cambiaríamos nada”, ha declarado Jasmine.
Donna ha hablado con el diario británico Telegraph, al que le ha transmitido que están abrumadas después de la relevancia mediática que ha adquirido su historia.
“Estamos felices de que haya funcionado tan bien y de que la información esté disponible. Ayudará a otras personas en el futuro. Te acerca más en lugar de sentir que una parte de la pareja tiene un vínculo mayor que el otro”.
Tenemos información de que tanto en Reino Unido como en Estados Unidos esta técnica está siendo utilizada por algo más de 100 parejas de lesbianas y es que parece ser que nos preocupa la cuestión biológica demasiado. A modo de reflexión que yo me hago: ¿es tan importante llevar a un bebé en el útero para sentirle tu hijo? ¿entiendes más a tu pareja o tienes mayor conexión con tu bebé por haberlo llevado dentro? Creo que en la mayor parte de las parejas de lesbianas y en muchas de heterosexuales no hay un componente biológico, bien porque solo una gesta o bien por adopción o acogimiento, y no creo que haya mucha diferencia en el amor que le tienes a tu bebé. De cualquier forma, esta es una técnica más al alcance de aquellas a las que esto les resulte vital.