Ya se acaba uno de los años más raros y difíciles que hemos vivido, 2020, el año que todos recordaremos por la pandemia del Covid 19, porque no pudimos abrazar a nuestras familias por mucho tiempo, porque el mundo cambió y por la cantidad de tiempo que pasamos encerrados en casa sin poder salir.
Para mi 2020 fue un año que me ayudó a darme cuenta de lo verdaderamente importante: mi familia, mi novia y mis amigos. Al final mi gran preocupación era que todos estuvieran a salvo.
La pandemia la he pasado mayoritariamente con mi novia en casa, creo que nos ayudó a conocernos más a fondo y a aprender a disfrutarnos más y dejar pasar las tonterías, y nos sorprendió a ambas con un deseo que hasta entonces no habíamos manifestado: convertirnos en mamás.
Afianzar aún más nuestra relación y disfrutar juntas de tener al menos un par de peques corriendo por la casa. Hemos descubierto las ventajas del teletrabajo y que podemos organizarnos muy bien.
Ya hemos empezado a andar los primeros pasos en nuestro deseo 2021. Lo primero que hicimos fue tener una cita online (cosas buenas que nos dejó la pandemia) con un especialista en IVI, que nos contó de los tratamientos, revisó algunas analíticas que teníamos, y nos hizo recomendaciones según nuestras edades y estilos de vida.
Después nos descargamos esta guía gratuita muy completa para mamás lesbianas, nos cuenta detalladamente cómo son los tratamientos, cómo es la legislación en España, nos habla de asociaciones de familias homoparentales, cuentos infantiles diversos y testimonios de otras familias de dos mamás.
Después de recabar toda esa información y medirnos la reserva ovárica, decidimos intentar embarazarnos a través de una inseminación artificial con semen de donante, IVI dispone de su propio banco y busca un donante que se parezca a nosotras.
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Quizás os parecerá una locura pero queremos inseminarnos las dos al mismo tiempo. Si nos quedamos las dos, maravilloso, si se queda solo una de nosotras, también un sueño hecho realidad.
Comenzamos en nuestro ciclo de enero, así que quien sabe, quizás después de un año tan difícil los Reyes nos dejan el mejor regalo que podemos desear.
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