Actualmente cualquiera de nosotras puede elegir un personaje lésbico favorito dentro de todos los que hemos tenido la ocasión de ver en televisión. Pero ¿os acordáis de cuando nuestros referentes televisivos eran nulos, super esporádicos o nefastos? Hoy vamos a hacer un breve repaso por la historia de nuestra inclusión en la pequeña pantalla, inaugurando así una nueva serie de artículos donde tocará rememorar los personajes más emblemáticos del lesbianismo en TV.
Todo empezó cuando éramos pequeñas y las series o películas que supuestamente debían conmovernos dejaban en nosotras una sensación extraña, incompleta, rayana en la frustración: las inquietudes románticas de esas chicas maravillosas que veíamos en la pantalla, inteligentes y guapas, con problemas existenciales semejantes a los nuestros, no podían sublimarse al conocer a un guapetón de porte surfero (aunque vale, sí, solía ser un encanto) que nunca estaba a la altura de su partenaire femenina. Percibíamos una desconexión, algo que no encajaba y que aparentemente nadie más advertía. Sin embargo, la esperanza volvía a aletear en nuestro interior cuando la protagonista femenina empezaba a mantener una relación más estrecha de lo normal con alguna de sus amigas: estábamos siempre atentas a la información subrepticia, esperando que sucediera algo que ni siquiera terminábamos de formular. El ejemplo por excelencia de esta situación es Xena, la princesa guerrera: la de Xena con Gabrielle es la relación lésbica soterrada por excelencia, y en ella se refugiaron muchos de nuestros sueños cuando los referentes en televisión aún eran una utopía.
Ya a principios de los noventa solía aparecer en TV algún esporádico beso entre dos mujeres, aunque sin ninguna importancia argumental y casi siempre para aumentar los niveles de audiencia (por aquello del morbo gratuito), pero no fue hasta la década siguiente cuando el lesbianismo emergió como una realidad potente en televisión. Pasamos de encontrar personajes marginales, atormentados, casi rayando la delincuencia (con tramas dramáticas, cortísimas y absolutamente secundarias) a entrar por la puerta grande con The L Word: por fin contábamos con un abanico amplísimo de personajes, con vidas perfectamente integradas o absolutamente desastrosas que nos aproximaron a un realismo donde la condición sexual ya no parecía ser el detonante de ninguna catástrofe.
A partir de aquí se multiplicaron los ejemplos de series que retrataban a lesbianas adultas (Exes and Ohs, Mistresses) y también a lesbianas adolescentes (Sugar Rush, South of Nowhere), normalizando cada vez más nuestra situación y convirtiéndose casi en un fenómeno de tirón mediático: muchas son las series que han terminado incluyendo una trama o subtrama lésbica que casi siempre ha servido para multiplicar su popularidad. Es el caso de Maca y Esther en Hospital Central, Pepa y Silvia en Los hombres de Paco, Ana y Teresa en Amar en tiempos revueltos, Isabel y Cristina en Tierra de Lobos, y también sus homólogas a nivel internacional, como Callie y Arizona en Anatomía de Grey, Brittany y Santana en Glee y las más recientes Piper y Alex en Orange is the New Black o Eleanor y Max en Black Sails.
Incluso nos hemos colado en internet, con las tan de moda webseries cuyo formato facilita la difusión: Chica Busca Chica, Apples o Muñecas en España y Out with Dad, InSight…The Rise Of The Seer o 3 way a nivel internacional. Está claro que los ejemplos tanto en series como en webseries son amplísimos, así que en esta nueva compilación de artículos vamos a analizar los personajes más emblemáticos, esos que resaltan por encima de los demás y con los que nos sentimos más identificadas.
Todas podemos adivinar ciertos patrones que suelen repetirse, ya que retratan tendencias fáciles de advertir en las lesbianas de nuestro entorno o incluso en nosotras mismas: chicas adróginas de pasado tormentoso y de presente tan inestable como irresistible (como Shane en The L Word, Sugar en Sugar Rush, Frankie en Lip Service o Alex en Orange is the New Black), chicas adorables (las mejores amigas de todo el mundo) con una vida sentimental algo revuelta (como Alice en The L Word, Tess en Lip Service, Kim en Sugar Rush o Spencer en South of Nowhere) o chicas que aparentemente no han roto un plato en su vida y luego se revelan algo más perversas (como Cat en Lip Service o Piper en Orange is the New Black). Así hasta dibujar un mosaico de personajes estelares con los que todas nos hemos reído y llorado, queriéndolos y odiándolos a partes iguales e incluso compartiendo con ellos nuestras inquietudes más profundas.
¿Estáis preparadas para el primer capítulo?
Inma Miralles
Además estan Emily y Maya en Pretty little liars y Emily y Naomi en Skins! Naomily es mi pareja preferida! Aunque es una lástima el final…
Se les ha olvidado mencionar a la maravillosa pareja melanie y lindsay de queer as folk, quienes destacaban en una serie que era mas bien para el masculino. Pero supieron encontrar su espacio y tocar temas interesantes como el ser madres. Saludos
No sé a ustedes, pero yo no puedo olvidar a una parejita que encontré preciosa -y que se notó en sus dos capítulos que las actrices, por lo menos eran amigas, porque había mucha química- Alma y Sol, interpretadas por Marina Salas y Macarena García, en dos episodios de hospital central. Desde ahí que sigo las carreras de ambas actrices jajaja
También hay que mencionar a Julia y Mariana, en Las Aparicio que fue una novela o teleserie mexicana que rompió a nivel general, al menos en ese país, con todos los tabúes 🙂
qué grande xena!! me pasaba los veranos pegada a la tele viendo los capítulos, me los sabia de memoria!!! a pesar de que al final se les va un poco mucho la pinza a los guionistas
Alex Vause….. XDD
Bette y Tina, willow y tara siempre fueron mis preferidas, pero la pareja de l word fue mucho más realista y cautivadora para mí.
Cristina e isabel en tierra de lobos..
Xena princesa guerrera..!!! El poder… La pasión… Y el peligro.. Muy buena!!!
como olvidar a Willow, en Buffy, aun amo esa inocencia…
oooh, Xena nos alegró el verano que estuve de baja por accidente a mi y al de la mutua que venia a verme a casa XDDDD
También hay que mencionar a Julia y Mariana, en Las Aparicio que fue una novela o teleserie mexicana que rompió a nivel general, al menos en ese país, con muchos temas considerados tabú.
Para
mi fueron las primeras Wilow y Tara en Buffy, hoy mis preferidas en la actualidad
son Callie y Arizona d Antomia d Grey y si tengo q elegir a mi mujer
favorita e ideal, Arizona Robbins o Jessica Capshaw me enamora esta
mujer, me tiene loquita.
Idgie y Ruth en la película Tomates verdes fritos, una relación muy sutil y de “amistad” pero finalmente una relación de profundo amor, más que evidente.
Adoraba a Xena de pequeña XD
L word es lo mejor realismo y chicas de todas clases.
Algunas de las series de la lista no las conozco pero intentare mirarlas.
Estoy de acuerdo en que falto Julia y Mariana (divinas!)
Tb Emily de PPL me agrada (pero no sus parejas)
Mi pareja favorita (fuera de L word….donde me gustan más de una) es Arizona y Callie. Tb abría que hacerle una mención a Tara y Pam de True Blood(aunque ya no las tengamos) y a la nueva “pareja” Amy y Karma en Faking it. Había otra serie alemana que no recuerdo el nombre del amor entre unas reposteras… Y bueno en Les Revenants tb hay algo entre una policía y una de los retornados.
Desde luego, Xena es mítica. Para mí, el referente por antonomasia. Aún me recuerdo a los 8 años viendo la serie y tapándome los ojos cuando Xena y Gabrielle se daban un beso casto… en una época en la que la palabra “lesbiana” ni siquiera existía en mi vocabulario.
Lo más antiguo que puedo recordar después de eso, aunque pasó de una manera intrascendente, son “7 vidas” y “urgencias” y “hospital central”, y recuerdo vagamente la serie que protagonizaba Ellen DeGeneres. La verdad, ahora q
[publiqué sin querer, continuo aquí]
Ahora que echo la vista atrás, recuerdo lo raro que se veía entonces y algunos comentarios que entonces no entendí, y lo triste es que a día de hoy no han cambiado tanto esos comentarios, es más, con el moderado pero existente crecimiento de la visibilidad lésbica en la televisión, comentarios del tipo “es que nos las quieren meter hasta en la sopa” o “eso no es real, tú ves en la calle que compañeras de trabajo o de universidad salgan juntas?” Parece difícil modificar la mentalidad social, pero a mí, sin duda, la reciente visibilidad me ha ayudado en algún sentido.
A mí la serie que más me ha gustado por su manera de presentar la sexualidad es “Lost girl” y otras como “OITNB”, “Orphan Black”, “Bomb Girls”, “Skins” o “Anatomía de Grey” también me parecen interesantes. Sin embargo, series dedicadas totalmente a la temática LGTB como es el caso de la consagrada “L Word” no atraen demasiado, aunque reconozco que muchas mujeres se habrán visto identificadas. No obstante, creo que la normalización a través de personajes en series de cualquier temática es la que realmente puede suponer un cambio social, aunque sea a través de personajes secundarios por cuestión de la oferta y la demanda y a pesar de que uno de los personajes de la pareja (si es que la hay) casi siempre sea bisexual y vaya de un lado a otro.
Un saludo y perdón por el testamento y las reflexiones divagantes 🙂
Imogen y Fiona (Fimogen) de Degrassi!
Clexa ❤️