Samantha Fox es sin duda, junto a Sabrina, la sex symbol de los 80´. Esta londinense acaba de cumplir, el pasado 15 de abril, 50 años, y queremos hacerle un homenaje repasando su sorprendente vida.
Samantha se hizo famosa del todo en España, si aun no lo era, cuando tuvo un affair de semanas con Rafi Camino en su juventud. Pero pronto llegaron las mujeres a su vida, algo de lo que Samantha hablaba orgullosa. Ella decía donde podía que era bisexual y que estaba con mujeres desde los 22, pero cuando llegó el amor de su vida, Myra Stratton, lo tuvo claro: “Por primera vez en mi existencia estoy enamorada. Con los chicos siempre estuve esperando a sentir lo del príncipe azul, pero nunca llegó. Ahora he encontrado a Myra. ¡Ella es mi principe azul!”
Cuando le llegó su repentina fama Samantha salía con Peter Foster. La relación no pudo vencer a su popularidad y, tras un romance con Paul Stanley, del grupo Kiss, la diva del destape tuvo una relación de 3 años con la cantante australiana Cris Bonacci, del grupo Sox.
Finalmente llegó Myra, diez años mayor que ella, quien fue su compañera y mánager durante 15 años, y con la que planeaba casarse en 2016. Desgraciadamente una grave enfermedad se la llevó hace casi un año, dejando destrozada a Samantha, “Adiós mi amor. No más sufrimiento. Siempre te querré y siempre estarás en mi corazón”, lloraba la cantante en sus redes sociales el día de su pérdida.
Pero empecemos por el principio. A los 16 años, la propia madre de Samantha la animó a enviar fotos en ropa interior para el concurso de belleza de una revista.
Fulminante fue la oferta que le hizo The Sun para posar desnuda en su periódico al ver dichas instantáneas. La joven y sus padres estuvieron encantados con la oferta, y ese fue el inicio de una meteórica carrera que dio el salto del modelaje a la música. Samantha, amante de las ingenierías y la danza, ya se había atrevido, a los 14 años, a formar un grupo musical como vocalista, pero fue su físico el que le permitió ser escuchada internacionalmente. Touch me. I want your body rompió todos los records en las listas musicales. Su padre dejó su trabajo y se decidió a ser su manager, algo que años después rompería la relación entre ambos para siempre, al enterarse la artista que la había estafado un millón de euros. En este último tiempo Samantha ha participado en la versión británica de Supervivientes, ha participado en otros realities y ha grabado varios recopilatorios. Incluso se ha atrevido como actriz en Bollywood, nada menos, y ha hecho también sus pinitos en Europa.
En su apogeo, todo el mundo la comparaba con Sabrina, la Samantha Fox del otro lado del Atlántico. “No soy el tipo de mujer objeto estilo Sabrina” renegaba, “Si yo he vendido tantos millones de discos, no ha sido por mis pechos”. Sabrina por su parte tampoco se quedaba corta: “La única similitud entre Samantha y yo son los senos. Yo si canto”.
Quién iba a decirles, (quizá su manager) que décadas después, las dos divas formarían un dúo musical. En 2010 grabaron Call me, de Blondie. “Nos encontramos en un festival, y simplemente decidimos que había llegado el día de trabajar juntas” explicaron.
El dúo les llevó por todas las salas del mundo, que pudieron disfrutar de sus innumerables besos y arrumacos en los escenarios.
No te pierdas el videoclip de Call me de Samantha con Sabrina:
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