Silvana está arrasando en Suecia, donde la conocen como la mejor rapera del país. -Ya tiene un Grammy en su haber, entre otros muchos reconocimientos: músico revelación de Suecia en 2012 y homosexual del Año en 2015 para la revista QX-.
Reside en Europa pero tiene ascendencia sirio-lituana, es lesbiana y visible y activamente feminista. Estudió psicología pero la industria musical llegó antes a su vida y nunca llegó a ejercer de psicóloga, aunque sin duda sus conocimientos de cómo funcionan las sociedades y sus personas influyen en sus letras. La música le llegó indirectamente pero para quedarse: Inicialmente escribía poesía y grababa sus creaciones. Lentamente esas poesías empezaron a coger melodía y se convirtieron en canciones de rap. Hoy en día es miembro de honor del colectivo de hip hop sueco RMH y no hay concierto suyo que no enseñe el cartel de “Completo”. Ella se describe a si misma como el Quentin Tarantino del rap.
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Es pareja de la productora y también compositora Beatrice Eli -juntas en la foto inferior-, con la que ha hecho muchas colaboraciones artísticas y activistas. Ser inmigrante la ha dotado de una perspectiva incomparable, se declara agradecida y muy consciente de las facilidades que le ha dado Suecia para llegar al éxito aun siendo mujer, pero es a la vez crítica con la hipocresía del sistema político y social de Europa y su machismo remanente. Sus letras son crudas, directas -no deja religión ni discriminación con cabeza- y decididas a denunciar las opresiones del mundo patriarcal.