Cuando Tania y Carol comenzaron a salir, hace once años atrás, recuerdan que se aislaron del mundo. Tania estaba en su último año de universidad y le costaba mucho asistir a clases. Durante casi un año apenas vieron a sus amigas, con suerte a sus familias.
“Estábamos fusionadas. Yo me enamoré por primera vez en la vida y solo queríamos estar pegadas, nuestra vida sexual era maravillosa, y lo fue durante bastante tiempo, pero qué te voy a contar después de once años de relación, de altibajos, de la rutina, de que tenemos una nena de dos años. Ahora los encuentros son muy esporádicos, y a veces si sacamos un rato puede ser que Carol esté agotada o yo. Creo que esa parte nos está separando”, nos cuenta Tania.
Lourdes y Noe no llevan tanto tiempo como Carol y Tania. Año y medio de relación. Pero Noe se siente frustrada porque cree que su chica tiene muchos complejos a la hora de tener sexo. “No se suelta, no se deja de llevar, le cuesta probar cosas nuevas y está cerrada a experimentar muchas cosas. No tiene muchos orgasmos, no encuentra el punto en su propio cuerpo. La vida sexual es nuestro talón de Aquiles, en todo lo demás funcionamos a la perfección, pero no sé cómo comunicarme con ella en esa área”.
¿Cuándo tenemos un problema sexual? ¿Se puede mejorar nuestra forma de concebir y relacionarnos con nuestra sexualidad? En la Unidad de la Mujer Recoletas nos explican que la sexualidad es mucho más que salud, amor y placer. “La sexualidad es muchas cosas: un objeto de estudio, una forma de relajarse, un estimulante o una fuente de placer total; pero también puede ocasionar frustraciones, inhibiciones o transformarse en un instrumento de afecto, de amor y ser utilizado para la reproducción de la especie”.
En la Unidad de la Mujer Recoletas, la unidad de psicología trabaja con parejas y en casos individuales para restablecer el bienestar y la satisfacción sexual. Nos explican en qué consiste y cuándo una pareja o una persona deberían plantearse asistir a terapia sexual:
¿Cuándo acudir a terapia sexual?
- Cuando existe malestar relacionado con la sexualidad(esto es, una disfunción sexual). El malestar puede provenir de multitud de disfunciones sexuales que pueden tratarse y resolverse: vaginismo, anorgasmia, dispareunia, parafilias, etc. La idea es que si no consigues disfrutar de tu sexualidad y ese estado no te permite disfrutar de tu vida diaria, se trabaja sobre eso.
- Cuando se tiene el deseo de mejoraralgún aspecto relacionado con la sexualidad.
- Cuando quieres aprender a conseguir orgasmos femeninos. Muchas mujeres son incapaces de conseguir una excitación plena o de alcanzar el orgasmo, lo que genera frustración personal y conflicto en sus relaciones. Aprender a conseguir orgasmos o a estar en mejor disposición de conseguirlos es sólo una parte del desarrollo sexual que dura toda la vida.
¿Para qué sirve el servicio de sexualidad y terapia sexual?
- Es una ayuda para mejorar tu sexualidad de forma integral en el desarrollo individual tuyo o de ambas como pareja, independientemente de la edad, la identidad, la orientación y/o la discapacidad.
- Para resolver tus dudas, recibir consejos o asesoramiento en temas de educación sexual, de terapias sexuales o de problemas de pareja.
- Para que las parejas rompan sus miedos, aprendan a comunicarse o bien-quererse para no hacerse daño, de forma que cada una pueda conocerse, quererse y aceptarse tal y cómo es.