Esta película, de género indescriptible, me ha dejado hipnotizada y feliz. Una historia bizarra que comienza cuando una ruptura interdimensional de la realidad cambia para siempre la vida de Evelyn, una inmigrante china que tiene una lavandería en Estados Unidos. Si esto suena a poco, a partir de ahí todo el guion es una locura maravillosa con un sorprendente desenlace.
En ese desternillante multiverso -hacía mucho tiempo que no me reía así- Evelyn se encontrará con infinitas versiones de si misma, y lo más importante, se encontrará con su hija, como nunca antes la había visto.
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Sobre la historia lésbica gira el origen y las consecuencias de la trama. Es la historia de Joy Wang, la hija de Evelyn, cuya intérprete, Stephanie Hsu, está nominada al Oscar a mejor actriz secundaria (una de las once nominaciones que tiene la película para el certamen, entre las que está la de Mejor Película).
Joy Wang tiene una novia y está muy enamorada de ella. Su madre acepta la relación aunque no con su mejor disposición. El problema es que no quiere contarle a su padre, abuelo de Joy, que su nieta es lesbiana, así que la presenta como una amiga. Desde aquí surge mucho, mucho y bizarro material de mundos paralelos.
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Es, sin duda, nuestra apuesta para los Oscar. Ya se ha llevado dos Globos de Oro (Mejor Actriz de Comedia y Mejor Actor Secundario), y el Premio a Mejor Película y mejor dirección en los Critics Choice Awards. Te dejamos con el trailer, aunque yo te recomiendo irte directamente al cine a verla:
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