Jennifer Cramblett y Amanda Zinkon son una pareja de lesbianas que, como tantas otras, decidieron recurrir a la inseminación artificial para tener hijos. Hace algo más de dos años acudieron al Midwest Sperm Bank y eligieron el esperma de un donante anónimo con características físicas similares a las suyas: raza blanca y ojos azules.
Midwest les envió seis viales de esperma (por los que pagaron 2.400 dólares), realizaron la inseminación y, en agosto de 2012, Jennifer dio a luz a Payton, una niña de “raza mixta”. La clínica les había vendido por error el esperma de un donante afroamericano.
De acuerdo con la demanda presentada por Cramblett, Midwest les remitió más tarde una nota de disculpa y les devolvió el dinero pero, con el paso del tiempo, las dos mujeres se han dado cuenta de las pérdidas económicas y emocionales que el equívoco les causa.
La familia vive en un pequeño pueblo de Ohio (Estados Unidos). Sus cerca de 3.000 habitantes son todos de raza blanca. Payton se acerca a la edad de escolarización y sus madres temen que sea la única niña “no blanca” de la clase. Según la demanda, para poder hacerle un buen corte de pelo a su hija deben ir a un barrio de color, lejos de donde viven donde, al parecer, la pequeña tampoco es bien recibida por sus rasgos blancos. Jennifer vive cada día con miedo, ansiedad e incertidumbre por su futuro y el de su hija. Además, Cramblett afirma que su propia familia es racista y no acepta su homosexualidad. Ella oculta su condición pero Payton no puede evitar ser mulata.
Los terapeutas de la pareja les recomiendan, por su bienestar y el de la niña, trasladarse a una comunidad más diversa.
Y digo yo.. ¿Dónde está el problema en ser la primera muestra de diversidad racial en una comunidad? No debería ser un problema. El racismo viene -lamento decirlo- de las propias madres, en este caso.
Estoy totalmente de acuerdo contigo 😉
Entiendo por un lado a estas madres, un hijo es un hijo siendo del color o la etnia que sea, pero según he leído , la mayoría de las parejas que se someten a este tipo de procedimiento buscan genes que se parezcan a los suyos por varios motivos, entre ellos porque al tener un hijo se busca que tenga parecido al de la pareja y/o a uno y lo segundo, es que así el niño/a también se siente identificado con sus padres/madres.
No sé si acabo de entender el problema. Puedo comprender que pidan responsabilidades al banco de esperma porque han pagado por un producto que no han recibido, pero… ¿de verdad puede ser problemático ser de color en una escuela en la que los demás no lo son? Pedimos derechos, visibilidad y resulta que ser lesbiana no es tan malo porque no se te nota cuando andas por la calle, pero ser negro, uf, se te ve en la cara.
Me parece que estas madres son MUY racistas.
Te doy toda la razon
La mas afectada sera la niña ya que nacio en un hogar de rasistas, y lo peor tendra que crecer en el, ya que si ellas mismas no la acepta como la aceptaran los demas, una madre ama a su hijo desde su vientre, y lo acepta como Dios se lo quiera dar. Mas que un error de el banco de esperma pienso y creo que es una expericiencia que dios les da a esta familia de rasistas
nadie se ha dado cuenta de que las dos chicas de la foto son gemelas?
SON GEMELAS? SON IGUALES! =)