Hace unos días os contamos lo que le sucedió a una pareja de chicas en el barrio Salamanca de Madrid. Celia y Capucine estaban de tiendas el sábado por la tarde, se dieron un beso mientras paseaban y el portero de un edificio comenzó a insultarlas y a gritarles.
VER: Agresión lesbófoba a una pareja de chicas en el barrio Salamanca de Madrid.
Las chicas, sin ponerse a la altura del agresor, supieron defenderse con un discurso que apelaba al lesbófobo a evolucionar y comprender que la orientación sexual no es un ataque a su persona.
Pero portero no hizo más que continuar su agresión. MíraLES denunció el hecho y el artículo se hizo viral. A tal punto que motivó la organización de mujeres lesbianas, como las de la plataforma “Encuentros Bolleros“. Así nos contaban las compañeras de lucha cómo transcurrió la manifestación a base de besos.
VER: El asesinato a mujeres lesbianas ha aumentado un 237% en Brasil.
“Las bolleras existimos y resistimos. Vamos a responder a cada agresión. Estamos unidas, estamos organizadas y no tenemos miedo. ¡NINGUNA AGRESIÓN SIN RESPUESTA!
Ayer leíamos la noticia de que una pareja de bolleras había sufrido una agresión lesbófoba en un portal de Madrid. Desde el bloque bollero decidimos convocar una acción. Esta tarde más de 40 bolleras nos hemos reunido en el portal donde tuvo lugar la agresión, nos hemos besado y hemos gritado contra la homofobia.
La visita coincidía con el fin de la jornada laboral del agresor, el portero, que ha permanecido escondido en el interior de la portería, desde donde ha llamado a la policía.
Otros dos hombres, que no se han identificado, han acudido en su auxilio. La concentración ha transcurrido durante algo más de media hora entre cánticos como “bolleras somos, bolleras seremos y en el armario no nos quedaremos”, “nos tocan a una, respondemos todas”, “estamos hasta el culo de tanto machirulo” o “mi cuerpo, mi vida, mi forma de follar, no se arrodilla ante el sistema patriarcal”.
A la visita también han acudido las dos chicas agredidas, que han agradecido la increíble respuesta de tantas bolleras que acudieron a la cita.
Ha terminado cuando el portero les ha pedido disculpas y ha negociado su salida, escoltado por sus dos acompañantes. Algunas vecinas y transeúntes han mostrado su apoyo a la protesta. La denuncia presentada por las chicas agredidas seguirá su curso”.
No podemos más que sentirnos agradecidas por tanta sororidad, y encantadas con tanta visibilidad lésbica ante las agresiones. También hemos hablado con Celia y Capucine, las protagonistas de la agresión. “Había mucha gente, ha sido muy guay, súper buen rollo, hicimos una gran besada. Al principio el tío se escondió. Después llegó la policía, él le llamó. Mi primo estaba en la puerta explicando a toda la gente, todo el mundo que pasaba, lo que estábamos haciendo. Y todo el mundo súper motivado con la causa y diciendo que el portero había estado fatal. La policía se portó muy bien, nos dijeron que nos entendían totalmente. El portero, mirándonos a los pies nos dijo que lo sentía, yo le dije, ‘no, míranos a la cara, porque hay que pedir perdón de verdad’. Él dijo: ‘lo siento muchísimo, no lo voy a volver a hacer’. También dijo que con una pareja heterosexual hubiera hecho lo mismo, y yo le dije ‘no trates de disimular lo que hiciste, sabemos muy bien que no es así’. Ha sido genial porque ha quedado en evidencia ante todo el mundo, porque la gente de las tiendas del interior del edificio le han reprendido por lo que ha hecho, incluso el presidente de la comunidad estuvo hablando con él. Estamos muy agradecidas de todo el apoyo, ha sido un momento genial, y ver tanta solidaridad sin conocernos, muy enriquecedor”, nos cuentan.
Estimada lectora, si alguna vez sufres una agresión ya sabes que puedes contar con MíraLES para denunciarlo. Y tú, agresor lesbófobo, ya puedes ver que ninguna agresión se queda sin respuesta. Si tocas a una nos tocas a todas. Combatiremos tu intolerancia con amor. Porque juntas somos muy, muy fuertes.
VER: Crimen lesbófobo en Chile. Brutal agresión a una chica que iba de la mano con su novia.
Bravo por ellas! Estupenda reacción y apoyo! Ojalá siempre fuera así.