Existen miles de formas de llamar a las lesbianas. Muchas veces hemos escuchado cómo se han referido a alguna de nosotras como bollera o desviada. Yo todavía recuerdo la primera vez que, estando en una cafetería, un grupo de amigos se reía y gritaba “Mira esas tortilleras ahí, dándose un magreo” o cosas semejantes, pero, ¿de dónde vienen esos términos? ¿Cuál es su historia?
Como todo en la vida, esto también viene de algún sitio y tiene explicación, alguna medianamente razonable; otros términos sencillamente son utilizados a modo de burla y ofensa.
El común de los mortales utiliza la palabra “lesbiana” para definir a las mujeres que mantienen relaciones con otras féminas. Pues bien, este término comenzó a utilizarse debido a que, a finales del siglo XVI, el escritor francés Pierre de Bourdeille seleccionó algunos poemas de amor entre mujeres en un libro que se tituló ‘Las lesbianas’, que hacía referencia a Lesbos, lugar donde residía la poetisa griega Safo (cuentan que dicha poetisa tenía un internado donde enseñaba a jóvenes nobles y que, además, mantenía relaciones con las lugareñas y les escribía poemas eróticos). A partir de entonces la palabra se popularizó y actualmente continúa siendo la más utilizada para definir a las mujeres homosexuales.
Pero ¿no os resulta curioso que nos llamen bolleras? A mí la verdad es que me ha hecho siempre mucha gracia. De hecho, recuerdo una vez que me dispuse a buscar en la RAE la definición, por si acaso, y me encontré con que decía “Bollero, ra: Persona que hace o vende bollos. despect. vulg. lesbiana.” Entonces me entristecí un poco. Que la propia Real Academia lo denomine como despectivo o vulgarismo y tanta gente lo utilice resulta bastante deprimente en los tiempos que corren, pero rebuscando por el ciberespacio he encontrado la realidad de por qué se utiliza.
Resulta que las boyeras (no, no es un error ortográfico, se escribía así) eran sacerdotisas que conducían carros tirados por bueyes por campos de siembra. Se celebraban ritos y ceremonias donde solamente había mujeres, dichas festividades tenían carácter astronómico. También se dice que, tras arar los campos, las sacerdotisas realizaban orgías sagradas para propiciar que la diosa agrícola asegurara la fertilidad del sembrado. De esta forma, el término boyera definía los actos lésbicos paganos. En el castellano perdió su significado cuando pasó a ser escrito con diferente grafía.
Volviendo a las tortilleras, navegando por los submundos de internet he descubierto que proviene de la novela de Severo Sarduy denominada Maitreya, en la cual el personaje de Iluminada lleva en su mano una tortilla fu-yong (una tortilla falsa donde no existen los huevos, que hacen referencia a los genitales masculinos). Este término es utilizado en muchos países de habla hispana, un ejemplo sería Cuba y también nuestro país.
Como veis, muchos son los calificativos que nos definen y cada uno tiene una historia distinta tras de sí. Si bien hay muchos que no tienen ningún tipo de raíz, como podría ser el de ‘desviada’, ‘invertida’ (este más bien suele ir referido a los homosexuales masculinos, de hecho en la RAE si buscamos la definición encontramos lo siguiente: eufem. Homosexual, especialmente el masculino.)
Lo que sí debemos tener muy claro es que, nos llamen como nos llamen, somos lo que somos y podemos estar muy orgullosas de serlo.
Verónica Font
Jeje… ¡¡¡lo sabía!!! Sabía que “bollera” con elle no respondía a las lesbianas. De algún modo, intuía que tenía que ser “boyera” y, por tanto, estar emparentado con “buey”… y ya de paso, con el budismo (el símbolo de la iluminación zen es “el boyero”). Me encanta que alguien me lo confirme. 🙂 🙂 🙂
¿Con el budismo? Cualquier cosa.
Mi suegra me decía “cochona”… ha… a su hija le decía “puta”
Una amiga colombiana cuando le explique que aquí nos llaman “Bolleras” y “tortilleras” y que parece que es que se nos da bien cocinar, me contó que allí nos llaman “areperas” de Arepas (Están muy ricas, por cierto)
Muy curioso esto de los nombres
A mí una vez me pregunto una persona , tu que eres tortillera o bollera y de la cual le contesto no , yo no soy ni cocinera ni pastelera , eso si soy camillera . y como no me enfade y le conteste con gracias pues se quedó cortada
Un buen chiste es la verdad tiene su chispa
Mi curiosidad hace años hizo que buscara de donde venían “los palabros” con los que nos denominan, o con los que nos denominamos nosotras mismas. La verdad que yo utilizo todos y cada uno de ellos, y nada me parece despectivo. Lo despectivo es la forma de decirlo, no la palabra. Tortillera me gusta, porque mis tortillas de patata además son….de lo mejorcito 😛 , jajaja, con lo cual, me va bien el término. Me encantan los bollos (o boyos, si quereis), y oye, lesbiana soy, jeje, y adoro la historia griega, literatura y todo lo que le rodea.
Felíz finde, amigas mías 🙂
Me gustaria conocerte sonieta, sigues siendo lesbi?
Me ha gustado bastante saber la procedencia de éstas definiciones que generalmente han sido impuestas con desprecio……no queda otra, el mundo es así y costará bastante demostrar como es cada uno, y a la vez ser respetado.
Soy del grupo hetero…..B+
Oh wow, aca en Argentina se usa ´´trola´´ o ´´torta´´. No se cual es el origen de esos, pero de algun modo no me agradan.. boyera me suena mas simpático, no se porque :/
De todas formas, interesante artículo 🙂
Buenas, yo a veces uso ‘bollera’ aunque conozco ‘tortillera’ Algunas veces en el grupo hacemos el signo d la tijera con las manos
Ninguna d estas alusiones es despectiva y en el 80% d los casos empleamos ‘lesbiana’
Saludos
Dudo mucho que el idiota de turno, sea cual sea que lo haya dicho por primera vez, era tan culto como para denominar a las lesbianas de boyeras por lo de las sacerdotisas de dicha leyenda.
Lo dijo de forma despectiva y punto no le deis mas vueltas.
Dios condena la homosexualidad como un pecado muy grave. Quienes la promueven no son buenas personas, y si no se arrepienten acabarán condenadas en el infierno (esto es una realidad).
Una persona homosexual puede dejar de serlo, y vivir felizmente manteniendo una relación amorosa con otra persona de distinto sexo. Sólo hay que pedirle ayuda a Dios en la oración, y Él os ayudará.
Existen terapias psicológicas que ayudan a dejar de ser homosexual. Sólo hay que tener voluntad de dejar de serlo.
Todos tenemos defectos de una clase u otra. La clave está en querer solucionarlos.
Pedidle ayuda a Dios, y Él os ayudará.
Si Dios existe no puede condenar su creación. No tiene sentido.
De hecho no puede condenar nada, porque la vida no es un acto voluntario sino sobrevenido y por tanto la personalidad y la conciencia no se eligen, se adoptan y condicionan el comportamiento humano sin remisión.
Así un fanático religioso no es culpable de no ver más allá de sus narices y ser un intransigente que condena todo lo que sea diferente y por tanto teme.
Pepe
NO sé como he llegado a este hilo, pero me encanta. Yo soy hombre bisexual, lesbiano, hipertrófico y aficionado al curling de arena. No os dejéis llevar por “los palabros” todo tiene un origen asociativo de ideas.
Sed libres, acostaos con quien queráis siempre que la otra parte (o partes) estén de acuerdo.
No existe el 0% ni el 100% más bien somos un claro abanico de posibilidades intermedias. A caso son todos los penes iguales? o todas las vulvas iguales? Creo que eso es precisamente lo que mueve la sexualidad humana, descubrir constantemente, aunque no tan frecuentemente como a más de uno nos gustaría.
A caso hay un solo tipo de “heterosexuales”: los hay que son clásicos y los hay que les gusta jugar de muy diferentes maneras con su pareja o a solas, y no por eso les damos un nombre diferente, tampoco suelen contarnos si les gusta esto o aquello: como están en la “norma” no se sienten obligados a especificar, y hay tantas variantes!!!!! Hay quien se masturba con frecuencia de mil maneras y otros que se sienten atormentados de una u otra manera por solo pensarlo, y en pareja o grupo ya ni te cuento.
Sed libres!!!!! Amaos a vosotras/os mismas/os primero porque es la mejor manera de amar a vuestras parejas o compañías eróticas.
Y si alguna le apetece saber en que parte de mi cuerpo tengo la hipertrofia que me avise, lo pasaremos bien.
Mi sección de literatura homoerótica:
https://www.revolucionespiritual.com/homoerotismo/
Pues yo he llegado hasta aquí porque “Boyeras” es un apellido. De mi familia. Y la verdad encuentro ofensivo que el término se tome a mal. Vivan las boyeras! Como sustantivo común o propio, da igual, no es ofensivo y si lo es, debería dejar de serlo…saludos!
El término “boyera” tiene, al menos en origen, connotaciones despectivas. Boyero es el hombre que guía bueyes, por tanto denominar boyera a una mujer era atribuirle cualidades masculinas. Es similar al término “camionera”, que surgió décadas después, cuando ya apenas había bueyes ni personas que los guiasen. Podemos pensar en la expresión “fumar (o jurar) como un carretero”, que se sigue usando pese a que ya no queden carreteros ni se asocie a la de un hombre que conduce una carreta.
Después de años de utilizarse (de forma casi exclusivamente oral) el término “boyera” acabó confundiéndose con “bollera”, ya que la ‘y’ y la ‘ll’ han pasado a pronunciarse igual (antiguamente no). Además, en un ámbito cada vez más alejado de lo rural, fue perdiéndose el sentido de la expresión original, y se hizo convencional la palabra “bollera”, más usual y con otras de su familia (“bollo”, “bollería”), pese a que no sugiera nada relacionado con la homosexualidad femenina sino a posteriori. Es curioso cómo a raíz de este cambio se han creado expresiones nuevas como “rollo bollo” o “comerse un bollo”, haciéndose tan popular el término “bollera” que hasta la RAE lo recoge en su diccionario con esta forma.