“Elisa frente al mar”, una historia de amor, pérdidas y reencuentros

Octubre de 2011. Dos mujeres se reencuentran en lo alto de un acantilado tras dieciocho años de ausencia. El pasado que une a estas dos mujeres, Nuria y Elisa, está construido a base de amor, renuncia y dolor. Su reencuentro significará el retorno a ese pasado perdido, a su adolescencia, su relación y las personas que dejaron atrás.

Elisa frente al mar es una historia de pérdidas y reencuentros. De un amor arrasado por una tormenta de silencio, homofobia y apariencia. También es una historia donde la violencia de género dejará una terrible e imborrable huella en la vida de sus protagonistas.

En la novela se hace tanto una denuncia contra ese opresivo y obligado silencio al que fue condenado el amor entre personas del mismo sexo (centrado, en este caso, en una pareja de mujeres), como una exposición de las trágicas consecuencias del machismo y la presencia de la violencia en el seno del hogar familiar.

La historia de Nuria y Elisa se inicia en los años 80, cuando ambas son adolescentes y coinciden en el instituto. Valeria, la mejor amiga de Nuria, es el tercer vértice de ese triángulo, la persona que siempre está a su lado y que acaba convirtiéndose en la voz de una realidad que Nuria no quiere escuchar. Porque el amor que sienten Nuria y Elisa es maravilloso, pero también un camino lleno de obstáculos, una trinchera desde la que ambas luchan, si bien en direcciones opuestas:

—¿Qué estuvimos haciendo todo ese tiempo?

—Huir. Yo huía hacia delante, tú tirabas de mí en otra dirección —sacude la cabeza—.  Luchar. Yo conmigo misma; tú, por mí.

La inseguridad de la adolescencia da paso al miedo, a años desperdiciados en la lucha contra la duda y los cánones establecidos. Una lucha en la que ambas serán perdedoras y que acabará arrojándolas a un mañana de ausencias. Elisa no puede evitar sentirse atraída por el canto de sirena que supone una vida libre de señalamientos con el dedo y Nuria va dejando cada vez más trocitos de sí misma en una relación asfixiada por la debilidad y los miedos de Elisa.

Sé que me has querido por encima de mí misma, de ti misma, y lo que eso te ha hecho. Toda mi vida he intentado ser lo que otros creían que debía ser. (…) He cometido tantos errores y tú has pagado por la mayor parte de ellos.

Pese al tono de drama que impregna la historia, el puntual sentido del humor, junto a la delicadeza con la que se describe la historia de amor entre Nuria y Elisa (sobre todo, esa primera vez en la que ambas deben enfrentarse al vértigo de traspasar la línea de la amistad para convertirse en amantes) hace que la novela navegue por distintos niveles de lectura, en un ejercicio de reconstrucción a base de flashbacks, que arranca con el regreso de una Elisa en plena madurez situándose metafóricamente frente a ese mar que actúa como un testigo de su vida, de su amor por Nuria, sus dudas, miedos y anhelos.

Si te has quedado con ganas de saber más, también puedes leer el primer capítulo.

Para saber acerca de la autora y su bibliografía, puedes visitar su blog en Clara Asunción García.