Señoras que se empotraron hace mucho

Un día una chica llamada Cristina Domenech enamoró a miles de twitteros con sus hilos sobre amores lésbicos de antaño. A través del humor y de un importante trabajo histórico recataba la memoria lésbica, esa que tantos historiadores han intentado sepultar.
Cristina ha combatido esta invisibilidad lésbica y ha publicado "Señoras que se empotraron hace mucho".

Señoras que seducían a otras señoras a diestro y siniestro y tomaban nota de las andanzas con pelos y señales en sus diarios. Parejas de señoras que iban a todas partes juntas y, se dice, ¡incluso dormían en la misma cama. Señoras que empotraban a señores y señoras por igual. Señoras, también de otros tiempos, que se batían en duelo o vestían con ropa de hombre o mujer según el día. 
ste libro, que contempla desde el siglo XVII hasta el siglo XX, explora la historia pública y privada de estas fascinantes mujeres que amaban a otras -Anne Seymour Damer, Anne Lister o Josephine Baker, entre tantas otras-, para visibilizar y sacar a la luz una realidad que nunca debería haber sido secreta

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